“Han planteado que la situación de las finanzas del Estado es compleja y que, por tanto, la Universidad se ve afectada en esa dirección”, esa fue la respuesta que el rector de la Universidad de El Salvador (UES), Juan Rosa Quintanilla, recibió del gobierno salvadoreño ante los reclamos del impago de $47 millones del presupuesto del alma máter, que Hacienda no deposita desde mayo del año 2022.

El rector aseguró ayer, en la entrevista de YSKL, que también sostuvo una reunión con el ministro de Educación, adhonorem, Mauricio Pineda, quien habría planteado “su preocupación e interés” para buscar la manera de que la universidad reciba los fondos necesarios para funcionar.

Rosa Quintanilla manifestó que no ignoran las mejoras en seguridad, pero afirmó que es importante mantener la asignación presupuestaria para la investigación científica. El rector no mencionó si el gobierno dio fecha para el pago del presupuesto.

¿Qué ocurre en la UES?

La situación presupuestaria se agravó desde el año 2020, cuando la UES tuvo que usar recursos financieros para comprar equipos de protección, ante la pandemia del covid-19, pero desde el año 2022, el Gobierno adeuda más de $47 millones, según el rector Quintanilla y debido a este impago, el alma máter se ha visto en problemas para pagar los servicios básicos como agua, energía eléctrica e internet para la conectividad de las clases, donde ya adeuda $19 millones.

Ante esto, el Consejo Superior Universitario aprobó una política de ahorro para enfrentar la crisis financiera.

El rector ha afirmado que actualmente el financiamiento de la “U” es a través de fondos propios y ahorros, pero que éstos son finitos, cuando esto ocurra, entonces si entrarán en una situación de ahogo presupuestario, para evitarlo, tocan las puertas de la cooperación internacional.

El pasado 19 de febrero, el rector confirmó que parte de este programa de ahorro es la suspensión del programa de auxiliares de cátedra; este programa alberga a los estudiantes sobresalientes de diferentes facultades, que pueden ser candidatos a ser docentes universitarios, y sirve para potenciar sus capacidades. Este programa afecta entre 80 a 100 estudiantes.

La política de ahorro también limitará los gastos operativos como la suspensión de nombramientos y remuneraciones “adicionales” para personal que labora en la institución, también las nuevas contrataciones, incrementos o ajustes, así como nivelaciones salariales.

También restringe la compra de materiales, papelería de oficina, la impresión de libros, revistas, boletines, prohíbe la compra de alimentos, el uso de vehículos institucionales, la entrega de vales de combustibles y promoverá el uso adecuado de servicios como agua y energía eléctrica.

Becas.

A pesar del plan de contingencia de “la U”, el rector sostuvo la semana anterior que no descartan suspender el programa de becas remuneradas por la misma crisis financiera.

El programa de becas agrupa a 1,200 estudiantes de la Universidad de El Salvador, de bajos recursos que reciben un estipendio por estudiar.

“Estamos dando el programa de becas a estudiantes de escasos recursos y que llegan y gestionan una beca remunerada, obviamente los recursos que tenemos son finitos y que si el gobierno no asigna para el pago de la beca remunerada de los más de 1,200 estudiantes seguramente eso será afectado”, declaró el rector en una entrevista televisiva.

En varias ocasiones, el rector ha dicho que a pesar de la crisis mantendrán la gratuidad de la educación pública superior para más de 62,000 estudiantes activos que tienen la institución este año, de estos, 12,000 son de nuevo ingreso.

El dato

Para el año 2024, la UES tiene asignados $114 millones en su presupuesto, de los cuales se ha asegurado el pago de planilla, no así el pago de servicios donde se adeudan $19 millones.