La organización Human Rights Watch repudió en una carta dirigida al presidente Nayib Bukele este miércoles el asesinato de tres policías en una comunidad de la ciudad de Santa Ana presuntamente en una emboscada de pandilleros.

El organismo reconoció los graves delitos por los que se persiguen a los integrantes de pandillas en El Salvador y recordó que el Estado está obligado a implementar medidas eficaces para proteger a la población de la violencia y delincuencia relacionada a las pandillas.

Es necesario que el gobierno adopte medidas sostenibles, eficaces y respetuosas de los derechos humanos para desarticular las pandillas que operan en el país”.

Comunicado de la HRW


También reprochó el enfoque de castigo a estos grupos, lo que Bukele ha denominado “guerra contra las pandillas”, acusándolo de “privilegiar el encarcelamiento masivo sin el debido proceso” y confirmó haber recibido en más de tres meses bajo régimen de excepción en El Salvador decenas de denuncias de violaciones de derechos humanos, incluso de personas ajenas a las pandillas.

HRW sostuvo que cuando se desmorona el estado de derecho “no es posible asegurar la protección de los derechos humanos de ningún individuo” y aseguró que los salvadoreños están actualmente “expuestos tanto a la brutalidad de las pandillas como a los excesos de la autoridad”.

La organización valoró como necesario que las fuerzas de seguridad salvadoreñas actúen respetando la presunción de inocencia y el derecho a la integridad física, asimismo, instó a priorizar la prevención y rehabilitación de miembros de pandillas para limitar el crecimiento de estas.

La carta enviada a Bukele por HRW fue firmada por Tamara Taraciuk, quien la compartió en Twitter mencionando a Bukele y recordándole que el organismo le ha solicitado una reunión para dialogar sobre derechos humanos en El Salvador.

HRW indicó en la misiva que el presidente salvadoreño aún no ha respondido a la solicitud de reunión que le envió el 2 de abril anterior.

Bukele arremetió el martes en conferencia de prensa contra organismos de derechos humanos, acusándolos de ser sus "aliados", como ya lo ha hecho en reiteradas ocasiones.

El mandatario prometió incrementar las acciones en contra de las pandillas tras el asesinato de los policías, en el marco del régimen de excepción que suspende derechos a toda la ciudadanía, el gobierno de Bukele dice haber capturado a más de 42,000 pandilleros.