El Juzgado de Primera Instancia de Dulce Nombre de María, de Chalatenango entrego formalmente, este jueves, la sentencia escrita que condena a tres altos exmilitares por el asesinato de cuatro periodistas holandeses en 1982, durante el conflicto armado de El Salvador.
"Este día la jueza ha entregado físicamente la sentencia, donde se contiene el resumen de los hechos que se conocieron, las pruebas y se consigna el veredicto del tribunal del jurado, el cual fue unánime", informó el abogado acusador, Gustavo Huezo.
El veredicto fue emitido el pasado 3 de junio por un jurado conformado por cinco personas, quienes de forma unánime encontraron culpables al excomandante de la Cuarta Brigada de Infantería, con sede en Chalatenango, coronel Mario Adalberto Reyes Mena; al exministro de Defensa, general José Guillermo García y al exdirector de la Policía de Hacienda, coronel Francisco Antonio Morán y fueron sentenciados a 15 años de cárcel, cada uno.
El abogado Huezo indicó que a partir de la entrega del fallo escrito, la defensa tiene el derecho de apelar la sentencia, sin embargo, explicó que el veredicto del jurado es inapelable, por lo que de hacer uso de dicho recurso se podría considerar la reducción de pena.
"El veredicto del jurado no admite recurso, es decir, al jurado no se le puede pedir explicación de por qué tomó una decisión o por qué no la tomó. Entonces, eso no es que sea apelable, lo que es apelable y que la defensa tendrá su derecho, con base al principio de igualdad y derecho de igualdad que tiene es de interponer recurso podría ser, técnicamente podrían ellos interponer recurso del tema de la pena", dijo el abogado.
En ese sentido, enfatizó que la pena era de 15 años por cada una de las muertes, sumando 60 años de cárcel, no obstante, la jueza condenó a la pena mínima a los exmilitares por "razones humanitarias", por sus edades.
En el caso que la defensa decidiera apelar el veredicto del jurado, el abogado, argumentó que este podría ser válido si posterior a la resolución del juicio se comprueben "circunstancias" que validen la incompetencia del jurado, no obstante, sostiene que la selección del jurado se realizó de manera "muy transparente", donde la defensa tuvo la oportunidad de impugnar a los jurados que consideraban que no cumplían los requisitos y el procedimiento fue transparente.
"Entonces, nosotros como acusadores particulares consideramos particularmente que se debe mantener la sentencia, no vemos que exista algún motivo como para interponer recurso", afirmó el abogado Huezo.
Además de la pena de cárcel, el abogado señaló que el juzgado impuso una condena civil en abstracto, lo que habilita a los familiares de las víctimas a presentar demandas en la jurisdicción civil para cuantificar y reclamar indemnización por los daños sufridos.
Por su parte, el presidente de la fundación Comunicándonos, Óscar Pérez, expresó que haber logrado una condena por el asesinato de los cuatro periodistas holandeses se trato de una lucha contra la impunidad de los delitos de guerra.
"Esta entrega es un acto histórico porque es una sentencia que derrota la impunidad en El Salvador porque se ha condenado a tres altos mandos militares que dirigieron la guerra durante el conflicto pasado y en este sentido es un aviso muy importante contra la impunidad", manifestó Pérez.
Koos Koster, Hans ter Laag, Joop Willems y Jan Kuiper fueron asesinados el 17 de marzo de 1982, luego que fueran emboscados en Santa Rita, Chalatenango, por soldados del Batallón Atonal que salían de la Cuarta Brigada de Infantería, de El Paraíso, en el mismo departamento.
Fueron emboscados por dicha patrulla mientras documentaban el impacto de la guerra en El Salvador, como parte de su labor para una televisión holandesa.
