La elección del papa León XIV fue recibida con entusiasmo en la comunidad católica del mundo, siendo el primer Pontífice estadounidense de la historia.

Dicho entusiasmo también fue compartido por la orden de San Agustín en El Salvador.

El fraile agustino, Moisés Rápalo, representante de la Parroquia Divina Providencia, en la colonia Atlacatl reconoce a Robert Prevost como un "maestro de novicios, formador en la comunidad religiosa".

"Es una tarea que, aunque pensamos que el papa está al frente, pero también es una carga que la compartimos como comunidad de fe, como iglesia católica", aseguró Rápalo.

El hasta ayer prefecto del Dicasterio para los Obispos y presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, era conocido como un cardenal discreto con basta experiencia en Latinoamérica.

"Creo que no hay palabras para describir la alegría que cada uno de los frailes sentimos en este momento", dijo el representante agustino sobre el nombramiento del pontífice.

El fraile Moisés Rápalo también recordó la visita en 2012 del ahora papa León XIV. En dicha ocasión llegó a la Parroquia Divina Providencia en una visita pastoral a la comunidad religiosa, misma que le llevó a visitar Honduras y Costa Rica.

"Debemos recomendar como iglesia es orar para sostener la misión y el trabajo que como papa va a realizar", dijo el fraile Rápalo.