El informe de la Cepal evalúa los avances de la región para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), relacionados con revertir las consecuencias del cambio climático para 2030.
Según el estudio, las olas de calor en El Salvador se extendieron 2.2 días en el período 2016-2020 en comparación con el ciclo 1986-2005.
De 19 países analizados, El Salvador es el tercero más afectado con períodos de extremas temperaturas, solo aventajado por Nicaragua con 2.2 días más de exposición y Costa Rica con 0.8 días.
En la lista de los más afectados se encuentra Surinam, con 15.2 días adicionales en las olas de calor, seguido de Honduras con 11.2 días.
La agencia de Naciones Unidas señala que la región latinoamericana se enfrenta a los efectos por el fenómeno climático de El Niño, que limita la oferta de alimentos por las pérdidas debido a los períodos de sequía o las altas temperaturas.
Al término de 2023, la Asociación Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo) estimó que se perdieron 2.61 millones de quintales, de los cuales 302,150 corresponden a frijoles y 2.31 millones a maíz, debido a los períodos secos, más los daños dejados por la tormenta Pilar en octubre.
Además, las temperaturas en América Latina y el Caribe han aumentado entre 0.7 y 1 grado centígrado con respecto al período 1961-1960.
Las olas de calor reportadas este 2024 han llevado a varios puntos del país a romper récords de temperaturas en más de 42 grados, según registros del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN).
En marzo, la temperatura máxima se reportó en la estación del Cerrón Grande con 42.8 grados el día 23, una marca no vista desde 1991.
La segunda temperatura más alta se registró en Güija, con 41.2 grados el día 24, un récord desde 2008. En tanto, en Cojutepeque se reportaron 37.2 grados el día 20, superando su marca predecesora de 1985.