Según Perdomo, quien fungió como director del OIE entre el 6 de enero del 2012 al 27 de mayo del 2013, tuvo conocimiento de las “condiciones irregulares” que se realizaban al interior de los centros penales, entre ellas, el ingreso de ilícitos, y la salida de pandilleros.
“Tuve conocimiento cuando yo era el director de la inteligencia nacional...era a través de informes de inteligencia..., de condiciones irregulares al interior de los penales...ingreso de objetos ilícitos, ingreso de equipos de sonido, no registro a los mediadores, desactivación del bloqueo de los teléfonos celulares, entrada y salida de personas que no eran sujetos a registros”, declaró Perdomo en el juicio.
Una vez tuvo conocimiento de esas irregularidades, afirmó a preguntas de la Fiscalía General de la República, que entregó informes al entonces presidente, Mauricio Funes.
“Los informes de inteligencia una vez se procesan se los entrego al presidente de la República (Mauricio Funes), porque es el único que está autorizado... porque se consideraba una información relacionada a la seguridad del Estado y la seguridad pública”, aseguró Perdomo.
“Desconozco que hace el presidente una vez se los entrego”, agregó Perdomo, sobre que sucedió o qué acciones se tomaron luego de que entregó los informes a Funes.
Explicó que los informes fueron entregados a Funes, en las instalaciones de Casa Presidencial.
La Fiscalía le preguntó si, como parte del gabinete de Seguridad, se había tratado la tregua como una política pública, a lo que respondió que nunca se trató como tregua, sino que fue un “Proceso de Pacificación”.
Aunque reconoció que hubo “acuerdos oscuros” dentro del proceso de pacificación, pero que los autores de esos acuerdos fueron los mediadores y los líderes de pandillas, sin embargo, aseguró tenían que estar autorizados por el Ministro de Justicia.
Los mediadores eran: Raúl Mijango, el obispo Fabio Colindres y el subinspector de la Policía Nacional Civil (PNC), Juan Roberto Castillo Díaz, y otro policía de nombre Wilfredo.
“La tregua la bautizaron los medios y es la parte de lo que podría ser los acuerdos secretos con jefes de pandillas... (acuerdos secretos) porque no se conocían...fueron en un momento dado llevados adelante por los mediadores y los dirigentes de las pandillas... La parte de la tregua a través de los mediadores se desarrolla en centros penales y policía, y eso tiene que ser lógicamente con autorización del Ministerio de Justicia...en ese momento David Munguía” afirmó. Los informes de inteligencia reflejaban que esos acuerdos buscaban un acercamiento para reducir los homicidios.
Aseguró entre esas irregularidades, hasta hubo traslados de pandilleros a una entrevista televisiva en una iglesia evangélica.
Fabio Colindres. obispo castrense. Archivo
¿Fin a la tregua?
En mayo del 2013, Ricardo Perdomo fue nombrado por Funes como Ministro de Justicia, en sustitución de Munguía Payés. Explicó que dentro de sus primeras acciones estuvo la destitución del director de Centros Penales, así como ordenar que los privados de libertad no salieran de los penales, ni tener entrevistas con medios de comunicación, “tenían que hacer un registro a los mediadores y tener un control de los objetos ilícitos y tener irrestricto respecto a la ley penitenciaria”.Aseguró desconocer cuántas veces los mediadores sostuvieron reuniones en los centros penales, mientras él era ministro de Seguridad, ya que esas reuniones eran autorizadas por cada uno de los directores de los penales.
La Fiscalía le preguntó ¿cuántas veces autorizó el ingreso de los mediadores?, y Perdomo respondió: “Nunca porque no me competía a mi como ministro dar esa autorización”.
“La última que hubo un ingreso de una computadora para un privado de libertad: “Tiberio”...la ingresó Paolo Lüers...cuando me reportaron el hecho se prohibió el ingreso de los mediadores a los penales”, sostuvo Perdomo.
Otros tres testigos, en calidad de directores de centros penales y un custodio, también narraron ayer las actividades ilícitas , pero todas con órdenes superiores de Centros Penales. La defensa de Munguía Payés aseguró que esos testimonios no implican participación de su cliente.
Hasta el momento han declarado 11 testigos, de los 24 que se prevé que hablen durante el juicio contra el exmandatario y el exministro.
Mauricio Funes, y el exministro de Justicia, Munguía Payés son procesados por agrupaciones ilícitas y actos arbitrarios, por avalar supuestamente la tregua con pandillas, entre 2011 y 2012, con la finalidad de reducir los homicidios en esa época.
Este jueves se tiene previsto declaren en el juicio el obispo de San Miguel, Fabio Colindres, quien fue uno de los mediadores de la supuesta Tregua.