El Tribunal Segundo Contra el Crimen Organizado de San Miguel, condenó este martes, a siete presuntos pandilleros ligados al caso “Conexiones”, con penas de hasta 164 años de cárcel.

“La @FGR_SV logró que varios de los pandilleros vinculados al caso Conexiones, recibieran condenas de hasta 164 años de prisión”, informó la Fiscalía General de la República en una publicación en la red social X.

Los presuntos pandilleros que fueron condenados a distintas penas son:
  • Selvin René Vargas Almendarez,164 años de cárcel.
  • Juan Andrés Manzano Bonilla, 44 años de cárcel.
  • José Ángel Venegas, 38 años de cárcel.
  • Milton Marín Cáceres Molina, 38 años de cárcel.
  • Óscar Melkin Moreno Romero, 30 años de cárcel.
  • Wilmer Vásquez Flores, 30 años de cárcel.
  • Elmer Edrulfo Ríos Mancía, 20 años de cárcel.

Según la entidad fiscal, con estas condenas se logró resolver diferentes delitos, los cuales son:
  • 16 homicidios agravados.
  • Dos casos de proposición y conspiración para cometer el delito de homicidio agravado.
  • Un caso de divulgación de la imagen o revelación de datos.
  • Un caso de extorsión agravada.
  • Ocho casos de tráfico ilícito.
  • 16 actos preparatorios, conspiración y asociaciones delictivas.
  • Organizaciones terroristas.
  • Agrupaciones ilícitas.
  • 13 casos de cohecho activo.
  • Un caso de simulación de influencia.
  • Un caso de fraude procesal.

La Fiscalía detalló que este caso fue judicializado en el año 2014,en la cual, una estructura criminal integrada por abogados, exjueces, policías y colaboradores de Juzgados Especializados de San Miguel, colaboraban con pandilleros del Barrio 18 para obtener resultados favorables en los casos de los criminales procesados en los Tribunales.

El caso

Este juicio que inició el 30 de mayo del año 2016, fue dividido en tres etapas: en la primera se conocieron los delitos cometidos por 127 integrantes de la pandilla 18, distribuidos en 13 canchas a nivel nacional del grupo de los sureños, dirigido por José Timoteo Mendoza, alias “El Chory”, cabecilla nacional de esa estructura procesada por 32 homicidios, nueve proposiciones y conspiraciones en el delito de homicidio, cuatro casos de robo, seis hechos de extorsión, tres homicidios tentados, un feminicidio, tres divulgaciones de datos o imágenes de personas protegidas y un tráfico de objetos prohibidos en centros penales.

En la segunda fase fueron enjuiciados 61 imputados por delitos relacionados a 18 casos de droga y se trata de una organización de presuntos narcotraficantes dirigida por José Enrique Torres, que infiltró instituciones del Estado entre el sistema judicial, Fiscalía y Policía.

Y la tercera etapa conoció los delitos de corrupción, entre ellos cohecho activo, cohecho propio, simulación de influencias y fraude procesal contra 11 abogados, cuatro empleados judiciales y cinco personas particulares.

Las indagaciones determinaron la existencia de una banda, en su mayoría pandilleros, que había traspasado fronteras ya que no operaba solo en El Salvador, sino que tenía conexiones desde Colombia, hasta los Estados Unidos.

Las pesquisas iniciaron tras un reconocimiento en rueda de personas y fotografías en las que se individualizó a los pandilleros.

Cuando se hicieron esas diligencias judiciales, Marlyn Carballo Flores, empleada del Juzgado Especializado de Instrucción de San Miguel, presuntamente informó a integrantes de la pandilla Barrio 18 que serían capturados.