La jefa de la Oficina de Aduanas y Patrulla Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) en el sector del Valle del Río Grande, Gloria Chávez, afirmó que en los últimos meses un incremento en la llegada de pandilleros de origen salvadoreño en la frontera sur de Estados Unidos, los últimos meses, pero no reveló cifras.

“Sí hemos visto (aumento) hemos registrado personas que tienen antecedentes y que están registrados como miembros de pandillas, y ya sea miembros del lado de Centroamérica, de El Salvador, o aquí, que están conectados a las pandillas de Estados Unido”, respondió Chávez a Diario El Mundo.

Desde marzo de 2022, el Estado salvadoreño aprobó un régimen de excepción que restringe el derecho a la defensa, a la detención administrativa por 72 horas y la inviolabilidad de las telecomunicaciones; desde entonces, se han registrado decenas de capturas de pandilleros en Guatemala y México, supuestamente, mientras huyen de ser detenidos en El Salvador, bajo el estado de excepción.

Chávez explicó que la comunicación con el gobierno salvadoreño les permite cruzar información y mapear quiénes de las personas que ingresan irregularmente a Estados Unidos son criminales, y entre estos, pandilleros; y en otras ocasiones, es evidente, debido a la cantidad de tatuajes en sus cuerpos.

Tras la detección y el registro como pandilleros, sino tienen orden de captura, son procesados como cualquier migrante irregular y deportados a El Salvador, pero si intentan llegar a Estados Unidos nuevamente sin legalizarse, el CBP alerta que se trata de una persona criminal y las autoridades colocan sanciones más duras.

“La alerta ya está en el sistema para saber quiénes son en un reingreso al país, y ya se le puede aplicar una consecuencia más larga de tiempo detenido”, añadió.