El director general de Protección Civil, Luis Amaya, recomendó a los padres de familia no dejar pólvora al alcance de los niños y evitar que estos manipulen este tipo de productos.
Amaya recordó que es “irresponsable” solo advertir a los menores que “tengan cuidado” con la pólvora sin garantizar una supervisión.
“(Hay que) mantener vigilados a los niños, no permitir que quemen pólvora solos”, puntualizó Amaya.
En el caso de tener un accidente, los cuerpos de socorro como la Cruz Roja recomiendan buscar un centro asistencial para atender la quemadura.
El actuar inmediato para las familias debe ser lavar el punto afectado con abundante agua, mantenerla hidratada y cubrirla para que esta se mantenga húmeda y evitar que se infecte.
Inspecciones
El vocero de Protección Civil recordó que actualmente las inspecciones se concentran en los lugares donde se comercializan fuegos artificiales y explosivos de temporada.Amaya dijo que los comerciantes que vendan productos, sin estar autorizados, se exponen a multas, pago por el decomiso de productos y enfrentar a la ley en el caso de provocar el daño a otras personas en algún accidente.
El gobierno reitera todos los años que silbadores, mortero número cinco, bombas de mezcal, políticas de fútbol, así como triángulo de la muerte, fulminantes, misiles chinos, botellas de champán y rocklet chino están prohibidos por las letales que pueden ser para las personas.
Todo comercio que comercialice este tipo de productos se expone a que la Policía Nacional Civil (PNC) decomise la pirotecnia.
Recomendaciones
Durante una entrevista televisiva en TCS Noticias, Amaya recomendó a la población salir con suficiente tiempo para evitar retrasos por el tráfico, así como revisar el vehículo para evitar accidentes de tránsito.“Mantener el vehículo en estado funcional es en principio normas que deberíamos cumplir”, acotó el funcionario.
El vocero de Protección Civil recomendó también no abusar de la velocidad y seguir las indicaciones que los salvavidas externen en las playas y balnearios.
Amaya hizo énfasis en evitar ingresar a las playas cuando se tengan banderas amarilla con blanco o rojas. La primera relacionada con enjambres de medusas y la segunda impide el ingreso por no ser una hora apropiada, porque hay corrientes de retorno o cambio de marea.