El jefe de la Unidad Técnica de Comercio en el Espacio Público de la alcaldía de San Salvador, Irving Rodríguez, expuso que este año las zonas de comerciantes informales que han sido desalojadas, serían las definitivas al cierre del año 2023.
“El proceso de ordenamiento continúa. Este año cerramos el año con lo que se ha hecho, con lo que establecimos, no hay nada más”, declaró el pasado jueves Rodríguez a Diario El Mundo.
De acuerdo con Rodríguez, la comuna capitalina ejecuta una evaluación sobre los procesos de reordenamiento realizados este año, por lo que hablar sobre los futuros movimientos de vendedores y las respectivas zonas a intervenir aún es temprano.
“Estamos haciendo una evaluación de todo lo que hemos avanzado y para donde vamos, y el señor alcalde (Mario Durán) va a dar el informe. De ese proceso (reordenamiento) claro que falta, eso sí se lo puedo garantizar”, expuso Rodríguez.
Además, expresó que “vienen las elecciones y estar hablando de esas cosas es como estar chocando con meteoritos, así que paciencia”.
¿Qué zonas fueron desalojadas?
El 2 de febrero, los primeros comerciantes informales que se ubicaban en el predio de la Ex Biblioteca y a orillas de la calle Delgado, fueron los primeros de este año en ser desalojados, con ello, más de 4,000 personas serían movilizados al mercado Tinetti, de acuerdo con la comuna.Posteriormente, el 14 de marzo, vendedores de los alrededores de la Iglesia El Calvario y parte de las afueras del Mercado Central fueron retirados de sus zonas de trabajo, sector donde se contabilizaron más de 1,400 puestos movilizados, según la alcaldía.
El 12 de junio, la municipalidad desalojo a vendedores de la 9a y 15a avenida Sur, las cuales conectan con la calle Rubén Darío.
La calle Rubén Darío también es otro de los lugares considerados libres de ventas. /Emerson Del Cid.
Más retiros
Sin embargo, el retiro de comerciantes informales no concluyó con dichos sectores, el 18 de junio, vendedores de los alrededores del edificio de la ex Lotería, específicamente de la 3a calle Oriente, el pasaje Cabañas y la avenida Monseñor Romero, fueron movilizados como parte del reordenamiento. Dicha zona era conocida como el rincón de la venta de libros usados.Desde ese entonces, la comuna capitalina enfatizó que el reordenamiento del centro supera el 95 %.
Por otra parte, el 11 de septiembre iniciaron los desalojos en los alrededores de la nueva Biblioteca Nacional. En los siguientes días, la municipalidad afirmó que solo restaba reordenar un 5 % de las ventas informales.
Los últimos retiros realizados por la comuna corresponden al 2 de noviembre, donde al menos 70 puestos de venta en la 4a calle Poniente, en las cercanías del Palacio Nacional fueron desalojados.
Tres días después, la comuna dio la orden de retirar a los vendedores que por más de una década se ubicaban en la 6a calle Poniente, además de una cuadra de la 4a calle Oriente y 4a avenida Sur, siendo estos el último grupo de comerciantes desalojados.
Los vendedores ambulantes recorren esporádicamente en Centro Histórico. / E. del Cid
De vuelta al modo ambulante
Ante dichos desalojos efectuados por la comuna, cientos de comerciantes informales regresaron a las calles del centro a vender de manera ambulante, esto con el fin de llevar el sustento a sus hogares, aseguraron los vendedores.Aunque la municipalidad asegura que les ofrece alternativa en los mercados municipales, los vendedores manifestaron en reiteradas ocasiones que no es factible instalarse en mercados como el Hula Hula o Tinetti, debido a la poca afluencia de visitantes.