Cerca de las 7:15 de la mañana, el sistema de emergencias 911 de la Policía Nacional Civil (PNC) reportó el asesinato de Gloria Arely García de Pérez, una cabo policial, a manos de su esposo, el subinspector de la corporación, Ricardo Pérez Nolasco, quien después se suicidó con un disparo en la cabeza, según el reporte preliminar.

La tragedia ocurrió en la la 15 calle Poniente y 87 avenida Norte, de la colonia Escalón, en San Salvador, frente a la embajada de Ecuador, supuestamente tras una discusión, al interior del vehículo, tipo pick up, placas P-31014.

Pérez tenía asignado el ONI E1209 y laboraba en la Unidad de Tecnologías de Información y Telecomunicaciones (UTIT), mientras que Gloria Arely García de Pérez, tenía el ONI 13602 y estaba destacada en la sección de Trabajo Social, en el departamento de Salud Mental.

El hermano mayor del subinspector, quien llegó a la escena, dijo que no sabía por qué su hermano seguía laborando “si tenía una lesión en la cabeza”.

Relató que en 2009, su hermano resultó herido de bala en la cabeza, en La Campanera, en Soyapango, y desde entonces se enojaba con facilidad.

“Vos rápido te enojás, fueras a pasar consulta... ese trancazo que tenés ahí como que rápido te alterás”, recordó Raúl Nolasco que le dijo a su hermano hace 15 días en una conversación.



A preguntas de periodistas sobre si sabía de problemas entre la pareja, Raúl Nolasco dijo que desconocía. “Si tanto eran los problemas, se hubieran separado”, lamentó al final.Añadió que su hermano ingresó a las filas de la corporación desde la fundación en 1993.

La Policía Nacional Civil confirmó que procesaban la escena a través de su cuenta de la red social X. “Según información preliminar, tras una discusión al interior de un vehículo, el subinspector de la Policía, Ricardo Pérez Nolasco le disparó a su compañera de vida y después se suicidó”, dice el mensaje.

El reporte preliminar de la corporación señaló que la pareja estaba en proceso de separación. La pareja tenía dos hijos, según la familia y vivían en Altavista.

Cuatro suicidios de policías.

Ante el hecho, el Movimiento de Trabajadores de la Policía Nacional Civil (MTP) señaló que cuatro miembros de la corporación se han suicidado, entre estos, dos agentes, un agente de la División de Protección a Personalidades Importantes (PPI) y ahora un subinspector.

Los reportes policiales señalan que el 15 de enero de este año, el agente Alejandro Ramos Recinos se suicidó después de una discusión con su esposa, en Tepecoyo, La Libertad.

El 28 de marzo reciente ocurrió un hecho similar donde el agente supernumerario Marcial Ernesto Zepeda Melgar asesinó a su exesposa y después se quitó la vida, en el cantón Chancuyo de Ahuachapán, mientras que el 6 de abril, siempre de este año, el agente Carlos Adalberto León González decidió terminar con su vida al ingerir pastillas “matarrata”. Según el mismo MTP, éste policía estaba en tratamiento psiquiátrico y estaba destacado en el puesto de San Lorenzo, en Ahuachapán.