Empleados y exempleados del Estado Mayor Presidencial en la gestión de Mauricio Funes, en calidad de testigos del juicio “Saqueo Público”, declararon ayer que el expiloto presidencial, Luis Miguel Ángel García, compraba casas y vehículos a través de testaferros, supuestamente de los $351 millones provenientes de la cuenta de gastos reservados de la Presidencia.

A preguntas de la Fiscalía General de la República, uno de los testigos aseguró que el expiloto de Funes le solicitaba favores, la mayoría eran compraventa de bienes e inmuebles, con precios de hasta $70,000.

Las compras.

Detalló que el piloto compró un vehículo Nissan entre 2013 y 2014, donde le dijo que le fuera “a traer” una camioneta; una vez en el lugar, los vendedores del carro le solicitaron el DUI y el Número de Identificación Tributaria (NIT), ya que saldría a su nombre. Una vez realizada la compra, el testigo entregó el vehículo al piloto en el parqueo de Casa Presidencial. El testigo dijo que la compra se hizo en efectivo, pero que no supo cuál fue el precio.

También adquirió una camioneta Honda Pilot, en las mismas condiciones y con pagos en efectivo.

El testigo narró un segundo favor hacia el capitán, y era el pago de tres casas en la residencial San Gabriel, en efectivo. Cuando finalizaron de pagar las tres casas, el piloto puso las escrituras de las viviendas a nombre del testigo, para que éste las alquilara a precios de $400 y $450.

Del arrendamiento de las casas, el testigo dijo que el capitán le encomendó el pago de la luz y agua, un seguro de vida, y el sobrante era para el padre del piloto, es decir, Luis Miguel Ángel García, este sí es procesado en éste juicio.

También aseguró que el piloto compró un lote en el volcán de San Salvador, por $20,000, la propiedad también fue registrada a su nombre, ya que fue el testigo quien realizó la entrega del dinero y la firma de las escrituras.

En esa propiedad se construyó una cabaña, y el material de construcción se pagó en efectivo, entre $400 y $500, entregados por el piloto.

De igual forma, el testigo dijo que el piloto le encargó hacer abonos a tarjetas de crédito, por $100 hasta $300, por dos años.

Otro testigo también dijo que el piloto le pidió “dos favores”, el primero fue comprar una casa de $70,000, pero a su nombre; estaba ubicada en Metrópolis San Gabriel.

Este favor fue porque, supuestamente, tenía problemas con su esposa. Cuando el caso fue judicializado se enteró que, según las escrituras de esa casa, él no la estaba comprando si no la estaba donando al padre del piloto.

García también habría comprado dos lotes más, uno por $3,700, ubicado en el cantón El Progreso, en el volcán de San Salvador , y otro por $4,000. Hace tres años se conoció que el expiloto de Funes huyó a Chile, prófugo de la justicia. Según la acusación fiscal, compró propiedades por un valor de $365,000, pero no tenía los ingresos para ello.