El Gobierno salvadoreño anunció que trasladó ayer en la madrugada a los primeros inquilinos de la megacárcel, ubicada en Tecoluca, San Vicente, construída exclusivamente para recluir a 40,000 pandilleros.

Según el presidente de la República, Nayib Bukele, fueron trasladados 2,000 pandilleros de la Mara Salvatrucha y del Barrio 18, cuya residencia será el denominado Centro de Confinamiento de Terrorismo (Cecot).

“Hoy (ayer) en la madrugada, en un solo operativo, trasladamos a los primeros 2,000 pandilleros al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot).Esta será su nueva casa, donde vivirán por décadas, mezclados, sin poder hacerle más daño a la población. Seguimos”, escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.

Según la Secretaría de Prensa de la Presidencia, fueron traslados pandilleros del penal de Izalco, Sonsonate, bajo un estricto operativo de seguridad, que incluyó seguidores y un seguimiento en helicóptero.

En el operativo del traslado de reos, realizado en autobuses, participó la Dirección General de Centros Penales, la Policía Nacional Civil, y la Fuerza Armada de El Salvador.
Fuentes penitenciarias confirmaron que los trasladados son cabecillas, corredores de clica y palabreros del penal de Izalco. Sin embargo, familiares de reos aseguraron que también hubo movimiento en el penal de Mariona.

“Se consideran un estimado de 90 buses que salieron de Mariona e Izalco rumbo al nuevo penal en Tecoluca... de otros penales no hay”.
Samuel Ramírez, del Movimiento de Víctimas del Régimen de Excepción (Movir).


Las cuentas de Twitter del Gobierno publicaron audiovisuales del traslado durante la madrugada, donde se observa a los reos, descalzos y vistiendo un short blanco, cuando son apilados en el penal de Izalco, luego subidos a los autobuses y trasladados por un pelotón de patrullas, policías en motocicletas y elementos de la Fuerza Armada.

Incertidumbre

Aunque las autoridades dijeron que solo pandilleros fueron trasladados, el Movir objetan que el sistema no es confiable y dudan que alguno de sus familiares también haya sido trasladado.
“Son las personas que en el régimen ya tienen más prueba que los vinculen con las pandillas, pero el problema es que con este sistema judicial que no es creíble y confiable, nadie puede dar certeza que solo sean mareros o pandilleros, ahí hay gente inocentes, ese es el temor de la familia”, añadió Ramírez.

Explicó que en los penales de Izalco y Mariona, desde el jueves, las autoridades dejaron de recibir paquetes para los reos “quizá porque sabían que los iban a trasladar, pero los días anteriores sí recibieron paquetes. Pero información como carteles que digan estas son las personas trasladadas, para nada (hay)”, añadió.

El nuevo penal de máxima seguridad está construido en 33 manzanas, pero el Gobierno adquirió 236, donde incluyen perímetros de seguridad de 600 elementos de la Fuerza Armada y 250 Policías, parte de estos últimos conformarán el Grupo de Intervención Penitenciaria Antidisturbios, según el director de Centros Penales, Osiris Luna.