Los tres pilares que la Universidad de El Salvador (UES) considera fundamentales: la docencia, investigación y proyección social no se detendrán pese a las crisis financiera que enfrenta la casa de estudios superiores, declaró el vicerrector administrativo de la UES, Roger Arias.

“Lo prioritario para nosotros es que las tres razones sustantivas de la institución que es la docencia, la investigación y la proyección social no se detenga, lo demás puede esperar pero no podemos dejar de tener grupos de clases”, informó Arias a Diario El Mundo.

El vicerrector académico expuso que el presupuesto asignado para plazas del personal académico no alcanza, por lo que se realizan las gestiones para que la universidad continúe en su ruta.

Arias reiteró que el presupuesto del Estado asignado para la UES no ha sido entregado en su momento y afirmó que las autoridades de la casa de estudios superior están en la obligación de buscar los acercamientos con el Gobierno para que los fondos sean transferidos.

Facultades en riesgo

El rector de la Alma Mater, Juan Rosa Quintanilla, indicó que parte de los fondos asignados a la UES se distribuyen a cada una de las facultades para su funcionamiento, por ello, se ha reunido con las autoridades de cada una para informar sobre los inconvenientes que atraviesa la “U”.

Quintanilla manifestó que existen facultades como Ciencias Agronómicas e Ingeniería y Arquitectura que requieren del uso de materiales o salidas específicas dado que requieren el uso de transporte para moverse al interior del país para las prácticas que solicita la carrera, por lo que se debe buscar el uso de los recursos para “funcionar de alguna manera normal”.

“La crisis se ha acrecentado, tenemos problemas para poder adquirir bienes y servicios que le permitan funcionar normalmente, así que en eso estamos”, expresó el rector Quintanilla a Diario El Mundo.

¿Qué pasa en la UES?

Desde el año 2022, el Gobierno adeuda más de $47 millones, según el rector Quintanilla y debido a este impago la UES se ha visto en problemas para pagar los servicios básicos como agua, energía eléctrica e internet para la conectividad de las clases, donde ya adeuda $19 millones.

Ante ello, el pasado viernes el rector reveló la aprobación de una política de ahorro de parte del Consejo Superior Universitario para enfrentar la crisis financiera que atraviesan.

“Hay un acuerdo del Consejo Universitario que establece medidas de austeridad en medida que lo que vienen hacer es buscar un uso más eficiente de los recursos. No obstante, esta medida no va a solventar el recurso financiero de la universidad”, dijo el vicerrector Arias.