Antes de analizar el tecnofeudalismo es meritorio definir qué es feudalismo: Según la Real Academia Española (RAE), el feudalismo es el sistema social y político de la Edad Media que se basaba en los feudos. El feudo era un contrato entre un soberano o gran señor y un vasallo, por el que el señor concedía tierras o rentas al vasallo. A cambio, el vasallo se comprometía a prestarle servicios, como el militar, y a guardar fidelidad. Por cierto, en la RAE aún no hay una definición sobre el tecnofeudalismo.
El tecnofeudalismo es un concepto relativamente nuevo que busca describir la estructura de poder que emerge en nuestra sociedad digital. Es una analogía que compara el sistema económico y social actual con el feudalismo medieval. Los propietarios de las empresas tecnológicas tienen controlados a sus siervos. Parece que entramos a una nueva era del postcapitalismo, eso según economistas. El tecnofeudalismo tiene el control de nuestros datos.
Hacer una comparación entre feudalismo y tecnofeudalismo es complejo; va más allá de un simple trabajador que labora en una empresa tecnológica. El interés de los propietarios de las empresas tecnológicas es dominar al mundo, como es el caso de lo que hacen las redes sociales de Estados Unidos, Facebook y la de China, TikTok. Es más, a los propietarios de estos medios les interesa hacerse dueños de los medios de comunicación tradicionales, con ello, podrán dominar mucho mejor al planeta.
Tal parece que el tecnofeudalismo tiene como objetivos concentrar el poder, tener el control de la tecnología en manos de pocas personas, vigilancia masiva; además, busca que los usuarios sean dependientes. Con este nuevo pensamiento moderno se evidencia el monopolio y una más influencia política. Por eso, Trump es amigo de Elon Musk. Han sabido mover las piezas.
En el mundo moderno estamos supeditados a la Inteligencia Artificial (IA), a los chatbots, a tecnologías como Alexa, Siri, etc. Los algoritmos nos tienen entretenidos durante todo el día; el usuario no necesita buscar, las redes sociales y otras tecnologías ya saben lo que les gusta y agrada. Mientras tanto, los bulos, fake news, la desinformación, son parte de la cotidianeidad del ser humano que se acostumbró a la nueva forma de dominar a las masas.
En la campaña electoral y toma de posesión de Donald Trump se vio muy de cerca al propietario de la red social “X”, Tesla, SpaceX. Además, tiene participación en: Neuralink, The Boring Company, Zip2, PayPal, SolarCity y OpenAI.
¿Quiénes son los que conforman el tecnofeudalismo? El propietario de Amazon, Jeff Bezos, Mark Zuckerberg (Facebook), Elon Musk (Tesla), Larry Page (Google), Zhang Yiming, (TikTok), etc. Tal parece que los gigantes tecnológicos (Big Tech) tienen el poder en sus manos. Es parte de la nueva era de la globalización. En la actualidad están luchando quién tiene el control a través de las IA. Mientras escribía esta columna surgió la nueva IA de China DeepSeek.
La manipulación de las masas es el tema que siempre abordo con mis alumnos. En la actualidad, el tecnofeudalismo vino para tener más control en todos los sentidos. Control en el marketing, la publicidad, la política y en las noticias. Cada plataforma tecnológica sabe cómo manipular. Sin duda alguna, el ser humano es fácil de manipular.
• Fidel López Eguizábal, Docente Investigador Universidad Francisco Gavidia flopez@ufg.edu.sv