Los sindicatos son instituciones de la sociedad civil. Los sindicatos en la práctica se fortalecen de la acción sindical. Los sindicatos son constituidos libremente por los trabajadores, que producen para sí y para éstos normas de validez general Art. 47 Cn., Art. 204 C.T., y Art. 207 C.T.; en consecuencia, la función de los sindicatos se orienta al desarrollo integral de los trabajadores; por lo tanto, vela por la defensa de los principios laborales, principios tales como: 1) Igualdad social; 2) Respeto a la libertad; y 3) Busqueda de mejores niveles de vida y participación democrática, Art. 270 C.T., y 272 C.T..

Expuesto lo anterior, se genera una nueva cultura laboral y de realidad socioeconómica, fundamento para que los sindicalistas encaucen su accionar al progreso y defensa de los intereses de los trabajadores. Dicho lo anterior hay mecanismos para ser efectivos los intereses que están relacionados con las condiciones de vida y de trabajo, conjugados para superar las dificultades en la concretización plena de sus intereses y derechos, pero todo dentro del marco de la constitución y de las leyes que regulan la materia. Los intereses antagónicos laborales se definen en la negociación colectiva, previa a la celebración del contrato colectivo de trabajo.

La negociación colectiva es dinámica, además debe de ser lo suficientemente flexible para que se pueda lograr acuerdos y entendimientos equilibrados. En esta fase del proceso de negociación, se requiere de parte del sector laboral negociadores formados en el arte de negociar. La negociación colectiva laboral su sustento radica en compensar desequilibrios en las relaciones laborales.

Los sindicatos representan a los afiliados en el proceso de negociación de los contratos colectivos de trabajo, cuyo objeto de negociación es ampliar los derechos de los trabajadores y mejorar las condiciones de trabajo; en tal sentido, se considera que el proceso de negociación tiene dos momentos: 1- Cuando se constituye legalmente a los negociadores y representantes de los trabajadores; y 2- El momento en que se reconvenida el resultado de la negociación. En este contexto las soluciones que contienen los acuerdos y entendimientos que deben de estar acordes a la mejor alternativa posible que favorezca y equilibre los intereses de las partes intervinientes.

El equipo negociador laboral debe de estar comprometidos en la defensa de los intereses que están en juego en la mesa de negociación, el cual debe tener una posición sólida y coherente en la estrategia de negociación, siendo clara para poder ser definida a plenitud y que la misma haya sido acordada y aceptada al interior del equipo negociador.

En tal sentido, no se admiten improvisaciones en el momento de la celebración de la negociación, porque ello desarmoniza y desune al equipo en su participación y a la vez se emiten señales al opositor de falta de unidad y lógica claridad en las propuestas. También los criterios deben ser objetivos, bien estructurados, y trazados para defender los intereses de los trabajadores. También el equipo negociador del sector laboral debe contar con la destreza, preparación y el conocimiento en beneficio del dominio de las tácticas, que es el verdadero secreto de un buen negociador.

La negociación colectiva debe contar con procedimientos equitativos, superando intentos d asimetría que no responden a la realidad, la cual le da validez al proceso negociador que refuerza la necesidad del mismo, que se celebra sin condiciones previas y que las partes se van consolidando a medida que se van conjugando los intereses en el proceso mismo, tomando en cuenta que en el contenido de la negociación hay que distinguir puntos que son urgentes y otros que son fundamentales. Las propuestas de negociación, se acentúan por acontecimientos acumulados y seguimiento necesario por concepciones distintas e intereses opuestos, es por ello, que el contenido debe ser flexible pero necesario de imponer en su parte sustancial, y así se configura desde el inicio de la negociación, se aplican maniobras, después se vuelven táctica y finalmente estrategias.

La pugna de intereses tienen naturaleza permanente, y los conflictos no tienen soluciones absolutas, sino que relativas, conforme al momento histórico se buscan salidas, que siempre son relativas. Los negociadores son los gestores auto determinantes en el manejo del proceso de negociación.