El Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología (MINEDUCYT) continúa un proceso de transformación de la educación en el país, con importantes avances. Quiero puntualizar en la educación superior que desde el siglo pasado y las primeras dos décadas fue muy cuestionadas por la proliferación de universidades privadas debido entre otras causas al conflicto armado que obligó en muchos tramos al cierre de la Universidad de El Salvador y por otra parte el nivel de las y los docentes, así como la falta de una visión estratégica del Ministerio de Educación, supervisión, control y evaluación del nivel de enseñanza, así como de los aportes a la sociedad, fueron administraciones con más pena que gloria, y con las consecuencias a nuestra República.

La actual administración del MINEDUCYT encomendada al señor ministro Mauricio Pineda Rodríguez ha iniciado un proceso de implementación estratégico para la educación superior con el apoyo del señor viceministro Ricardo Cardona Alvarenga y sus equipos, disponen y ejecutan la Política Nacional de Educación Superior aprobada en el presente gobierno, la cual se elaboró bajo criterios de participación horizontal, transparencia, inclusión, de manera que trascienda períodos gubernamentales, convirtiéndose en una apuesta estratégica de Nación. Para ello cuentan con el invaluable apoyo de la Dirección Nacional de Educación Superior que dirige el doctor Christian Aparicio, y que le ha generado una dinámica de trabajo, un estilo, visión estratégica, y la calidad que necesitaba el ministerio, las universidades y el país.

Los objetivos de esta Política Nacional de Educación Superior responden a los nuevos retos de país enmarcados en cinco ejes que se articulan en función de mejorar el acceso de la población al nivel educativo superior, generar una formación de calidad, incrementar la competitividad de los graduados, crear las condiciones para un desarrollo profesional académico sistemático, aportar al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, hacer de la innovación un elemento indispensable en el que hacer del sistema, incidir en la articulación efectiva de las funciones de la educación superior, contribuir en el dinamismo productivo, económico del país, incrementando el bienestar de la sociedad, como puede leerse todo un enorme reto y desafío por todas las autoridades del ministerio, dirección de educación superior, y todo el equipo de apoyo, que por el momento están aprobando con excelencia, y lo cual se puede medir por medio de diferentes indicadores.

El fortalecimiento de la educación superior pretende garantizar un sistema de educación superior pertinente y de verdadera calidad que responda a la realidad actual de El Salvador, su visión de país, para ello las Instituciones de Educación Superior (IES) deben convertirse en agentes de vinculación entre la Academia, el mundo laboral y la sociedad, así como fomentar la investigación e innovación real. Las IES deben de apoyar el desarrollo y visión de país, con la actual dirección hay un nuevo proceso de acreditación de las IES, donde ya no solo se consideran aspectos administrativos y académicos globales formales, sino que existe una intención de acreditar los programas de formación específicos, una mejor integral.

Existen grandes esfuerzos del Gobierno por reformar la Ley de Educación Superior, la cual data del año 1996. Introduce aspectos innovadores como la internacionalización de la educación superior y el concepto de créditos académicos para hacerla más flexible y homologable, que marcan una nueva hoja de ruta para la próxima década.

En este proceso he podido ser testigo de parte de esta visión estratégica al cursar y aprobar la certificación para docentes del nivel superior que tiene una duración de tres años que permite ingresar a una base de datos del MINEDUCYT de docentes certificados para brindar servicios de clases en IES. El proceso de formación consta de cinco módulos, y están divididos de la siguiente manera: un primer módulo de introducción al curso de certificación, y cuatro especializados: psicopedagogía y neurociencia, didáctica de la educación superior, tecnologías de la información aplicadas a la educación superior y evaluación confiable y válida.

Agradezco públicamente al MINEDUCYT y en especial a la Dirección Nacional de Educación Superior esta alta formación especializada, por la calidad y excelencia de los docentes nacionales e internacionales que imparten la certificación, así como transformar mi pensamiento y visión como docente a nivel superior.