El Salvador registra a mediados del año 2024 condiciones tolerables y aceptables internacionalmente de violencia, delincuencia y criminalidad, no es que no existan, ya que ningún país en el mundo tiene esos niveles, pero ahora podemos pensar en mediano y largo como país, en particular para la presente y siguiente generación, en esa dirección la educación y un eje transversal para el desarrollo humano y de nuestra sociedad.

El gobierno del presidente Bukele implementó políticas, estrategias, planes en diferentes carteras de estado, una de las que mejores resultados presento fue en el ministerio de educación, ciencia y tecnología (MINEDUCYT) el nombramiento del ministro José Mauricio Pineda Rodríguez, y su equipo de trabajo, como también en las direcciones, jefaturas y coordinaciones, y todo el equipo administrativo y de docentes a nivel nacional, permitieron que el país avanzara en materia de educación inicial, parvularia, primaria y secundaria, con estrategias novedosas e impulsando una educación de calidad, una atención a las y los estudiantes a nivel nacional, y en la educación superior también la Dirección Nacional de Educación Superior (DNES) efectuó lo propio, con una coordinación y acercamiento con las universidades y las Instituciones de Educación Superior (IES) en un trabajo en equipo.

Ahora con el proyecto de Ley de Educación Superior (LES) en mi opinión luego de sentar las bases desde inicial hasta bachillerato y la gran labor de la DNES, es momento de de trascender a un marco regulatorio de nuevas condiciones y exigencias en las universidades e IES, para buscar la excelencia académica, potenciar las capacidades, ponernos en una igualdad ante universidades del mundo, y considero que una prioridad es formar personas y profesionales integrales para estar acorde a las exigencias de la presente y próxima década, como las tecnologías de la información y la comunicación, inteligencia artificial y la imperiosa necesidad de que los profesionales de pregrado, postgrados, maestrías y doctorados estén comprometidos con una vinculación social de los problemas y desafios de nuestra sociedad.

Luego de 20 años del decreto legislativo N.468 que promulgo la actual LES, y de más de treinta años que no ocurren verdaderas transformaciones en la educación superior, ahora es un excelente momento para conocer, promover, discutir, aportar y aprobar el nuevo proyecto de LES que nos permite estar a la altura de los retos de nuestra sociedad, los cambios permanentes y acelerados de tecnología, científicos, y de nuevas modalidades de empleo y negocios, se requiere potenciar al máximo las altas capacidades de nuestros estudiantes y profesionales del nivel de educación superior, que las universidades e IES brinden un salto de calidad cuantitativo y cualitativo que lo pueden hacer y alcanzar, profesionalizar a los docentes así como dignificar la docencia a nivel superior.

Este proyecto LES es una gran oportunidad para mejorar y fortalecer la regulación, y la hoja de ruta para la Educación Superior, y de igual forma normar la creación y funcionamiento de las instituciones públicas y privadas que llegaran a integrar este nuevo sistema de educación superior. Todos los sectores debemos aportar y sumar para que este proyecto de LES sea una realidad lo más pronto posible y garantizar que el ente rector el MINEDUCYT logre los objetivos estratégicos.


• Ricardo Sosa es criminólogo