El patrón que existe, explicó en un informe publicado el lunes por Amnistía Internacional, son detenciones basadas en denuncias anónimas, tenencia de tatuajes o antecedentes penales previos de cualquier tipo; además de audiencias exprés contra grupos de hasta 500 personas celebradas ante un juez de identidad reservada.
En ninguno de los 50 casos que hemos documentado se ha logrado verificar la existencia de procesos de investigación con respecto a la actuación de funcionarios públicos”. –Erika Guevara Rosas, Amnistía Internacional.
De entrevistas a detenidos, concluye que hubo “sometimiento a torturas y tratos crueles y degradantes por parte de agentes policiales y custodios” y que “golpizas” para lograr supuestas confesiones de vínculos pandilleriles o como castigo, además de hacinamiento extremo, insalubridad, falta de servicios básicos, entre otros.
La organización internacional concluye que durante el régimen de excepción las autoridades salvadoreñas han cometido “graves violaciones de derechos humanos de forma sistemática” y que hay “organización y planificación estatal en la que confluyen los tres poderes del Estado”.
De esa manera, Amnistía Internacional concluye que “la sistematicidad de las violaciones de derechos humanos podría acarrear para los agentes del Estado salvadoreño una responsabilidad penal internacional individual, por el incumplimiento de sus obligaciones de prevención y sanción sobre estos hechos”.
Las condiciones descritas en el informe de Amnistía Internacional han sido rechazadas por el vicepresidente de la República, Félix Ulloa, en una entrevista publicada por la BBC News, en la que dijo que “la policía no ha acudido a las comunidades a capturar a la gente porque tiene tatuajes o porque ha habido una llamada anónima”.
Esa es una mentira que ha sido difundida por la oposición política en El Salvador y que los medios y otra gente en el extranjero han dado por sentada. La verdad es que cuando la policía acude a capturar a una persona en una comunidad es porque tiene e perfil”. –Félix Ulloa, vicepresidente salvadoreños a la BBC.
El vicemandatario sostuvo que en el cerco militar de Soyapango capturaron a “gente que tenía un historial”. Únicamente detalló que “hay una base de datos”. Sin embargo, respondió “podría ser” a la pregunta sobre “miles de detenidos sin ningún vínculo con las pandillas en la cárcel”.
“Podría haber unos pocos casos pero cuando hemos sido conscientes de alguna situación hemos tratado de corregirla”, indicó sobre la captura de personas inocentes en el régimen de excepción. “Ningún trabajo humano es perfecto pero, como dije, lo perfecto es enemigo de lo bueno”, afirmó en esa entrevista.