La organización Amnistía Internacional criticó hoy que aún no haya acuerdos en la suspensión global de la venta de programas espía y que el sector de la vigilancia “continúa operando sin control” a un año de escándalos por el uso del programa Pegasus para la vigilancia política de activistas, periodistas y políticos.
Un año después de que las revelaciones sobre el programa espía Pegasus conmocionaran al mundo, resulta alarmante que las empresas de vigilancia sigan beneficiándose de violaciones de derechos humanos cometidas a escala global”.
Danna Ingleton, directora adjunta de Amnesty Tech.
La investigación divulgada por la organización en julio de 2021 “El Proyecto Pegasus” concluyó que gobiernos de todo el mundo utilizaron el programa espía Pegasus, de la empresa NSO Group, “para vigilar de manera ilegítima a activistas de derechos humanos, líderes y lideresas políticos, periodistas y profesionales del derecho”, dice el comunicado divulgado este 18 de julio por Amnistía Internacional.
Agrega que tras reiterados llamados por la regulación del sector de la vigilancia, se han dado ciertos pasos en la dirección adecuada, pero que la actuación de los gobiernos sería suficiente.
“El Proyecto Pegasus vino a recordar la necesidad de actuar con carácter de urgencia para regular un sector que carece de control. Es vergonzoso que los gobiernos del mundo sigan sin dar un paso al frente para abordar en su integridad esta crisis de vigilancia digital”, afirmó Danna Ingleton.
También, califica de "selectiva e ilegítima” la “vigilancia a defensores de derechos humanos y de la sociedad civil.
“El Proyecto Pegasus” fue una investigación realizada entre periodistas de 17 empresas de comunicación, procedentes de 10 países, cuya coordinación estuvo a cargo de Forbidden Stories.
El laboratorio ha confirmado que en numerosos casos se seguía utilizando Pegasus para atacar de manera ilegítima a determinadas personas en países como El Salvador, Israel y los Territorios Palestinos Ocupados, Polonia y España.
En el caso de El Salvador, el “Proyecto Torogoz”, con la participación de Citizen Lab y Access Now, confirmó 35 casos de periodistas y miembros de la sociedad civil cuyos teléfonos se infectaron con éxito con el software espía Pegasus de NSO, entre julio de 2020 y noviembre de 2021. La investigación se dio a conocer el 12 de enero de 2022.
Hay investigaciones abiertas
Según Amnistía Internacional, hay investigaciones abiertas y causas judiciales contra NSO Group pendientes de resolución en Francia, India, México y Polonia. En marzo de este año, el Parlamento Europeo estableció la Comisión PEGA para investigar el empleo de Pegasus y de otros programas espía en Europa.En noviembre de 2021, el gobierno de Estados Unidos incorporó a NSO Group a su Lista de Entidades por “realización de actividades contrarias a la seguridad nacional o a los intereses de política exterior”.
Ese mismo mes, la empresa Apple presentó una demanda contra NSO Group para pedir responsabilidades por la vigilancia y los ataques que habían sufrido usuarios y usuarias de Apple.
“Seguimos pidiendo la suspensión mundial de la venta, transferencia y empleo de programas espía mientras no se instauren salvaguardias de derecho humanos que regulen sus empleo”, reiteró Amnistía Internacional.
