Una primera consulta a diferentes sectores involucrados y expertos deja ver beneplácito de algunos y muchas dudas sobre la propuesta de reforma de pensiones del gobierno, concretamente sobre si es posible financiar pensiones mínimas equivalentes al 130 % del salario de los trabajadores y también cuál será la fórmula para calcular las pensiones de quienes perciben un salario superior.

“La recibimos con beneplácito, sin embargo, en la explicación no se abordó cuál será realmente la fórmula de cálculo de la pensión para las personas que tienen salarios superiores a un salario mínimo”, dijo Paz Zetino, miembro de Bases Magisteriales y secretario general de la directiva de Bases Magisteriales del departamento de La Libertad.

Zetino aseguró a Diario El Mundo que siempre han objetado el papel de las Administradoras de Fondos para Pensiones (AFP) pero no lo mostró como punto de honor si un nuevo Instituto controlará a las AFP.

“Como Bases Magisteriales y como Mesa de Trabajo por una Pensión Digna objetamos siempre la actuación de las AFP. Si de nosotros dependiera, las AFP no existieran ya, ahora, tal cual ha dicho el gobierno, son respetuosos de la iniciativa privada, no tenemos nada qué objetar, ellos sabrán cómo manejan la política de su gobierno, lo que nos interesa es que la pensión se mejore”, afirmó.

Sin embargo, el líder sindical aseguró que están esperando la propuesta completa y que están optimistas.

“Aventurada”.

Otros sectores dudan del financiamiento de la promesa gubernamental de financiar pensiones mínimas superiores al salario mínimo percibido por los trabajadores. Patricio Pineda, fundador de la Mesa por una Pensión Digna, consideró que la promesa es “bastante aventurada”.

“No dijeron cuánto va a ser el porcentaje que van a verse aumentadas estas pensiones futuras, ni tampoco cuánto se va a ver aumentado la revalorización”, dijo el viernes en un space de Twitter.

Pineda señaló que más del 68 % del universo total de los cotizantes reciben pensión mínima y se pregunta de dónde se obtendrá el financiamiento del aumento de las pensiones mínimas a $400.

“Eso quiere decir que las personas que tienen $365 de salario van a tener una pensión sobre la base de 135 %, la primera pregunta que me surge es de dónde van a salir los recursos para pagar semejante cantidad”, planteó.

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“No será estructural”.

Para el economista Rommel Rodríguez, con lo poco que se conoce de la propuesta, esta no será estructural como lo habían estado pidiendo algunos sindicatos que respaldan al gobierno, sino que solo buscaría mejorar un poco la suficiencia.

“El ministro de Hacienda ha indicado que las AFP se mantienen, no sé, quizás esto le traiga al Ejecutivo un costo político”, afirma el analista macroeconómico de la Fundación Nacional para el Desarrollo.

El gobierno ha propuesto una reforma de pensiones en la que suben 1 punto a los ahorros del trabajador aportados por el empleador. La Unión Sindical Salvadoreña (USS) había pedido al presidente un sistema de reparto, con la consecuente anulación de las cuentas individuales, nacionalizado y dirigido por un instituto con dominio del sector laboral que otorgara pensiones equivalentes al 70 % del monto salarial e incluso valorara dar pensiones universales con un impuesto al patrimonio o a las ganancias.

Advertencia: déficit en la CGS.

El economista de la Funde también advirtió un riesgo si a la Cuenta de Garantía Solidaria (CGS) se le carga el seguro por invalidez y sobrevivencia, cuyo costo actualmente es absorbido por la comisión de administración de las AFP. De los 1.9 % de comisión, 1 % se destinan a dicho seguro.

Rodríguez advierte que, con el cargo del seguro, el déficit de la CGS se acelerará.

La CGS, la cuenta colectiva que sirve para pagar pensiones mínimas o devoluciones de aportes, presentará déficit a partir de 2028 según el informe de valuación actuarial del sistema de la Superintendencia del Sistema Financiero publicado por Transparencia Fiscal.