La Asociación de Radiodifusión Participativa de El Salvador (ARPAS) y la Red por el Derecho a la Comunicación (RedCo), que aglutinan radios comunitarias y de organizaciones sin fines de lucro, exhortaron hoy a diputados abrir un debate público de la propuesta de reforma que ha presentado el Gobierno a la Asamblea Legislativa para entregar concesiones de frecuencias de radio, televisión y telefonía.

La ARPAS teme que la Superintendencia de Electricidad y Telecomunicaciones (Siget) utilice las reformas para otorgar estas frecuencias de manera arbitraria e incluso cree que podría facilitar el acaparamiento de frecuencias.

Si hay necesidad de reasignar espacios que no son utilizados, para nosotros es bien visto. Sin embargo, esa intención de reasignar puede tener dos elementos: reasignar con mis intereses o a mis cercanos o quien esté de acuerdo con los contenidos, o una posición no crítica, en ese sentido no lo vemos viable.

René Linares Coto, presidente de ARPAS.


¿Cuáles son las dudas de ARPAS sobre la reforma a la ley de telecomunicaciones propuesta por el Gobierno?

1. Subastas

La propuesta presentada por el Ministerio de Economía para reformar la Ley de Telecomunicaciones mezcla nuevamente la figura de la subasta con la de concurso.

La reforma realizada en 2016 separó ambos procesos, para evitar que las radios comunitarias, sin fines de lucro, tengan desventaja en las subastas porque en este proceso prevalece el solicitante de mayor capacidad económica.

2. Nuevo requisito: calidad

Una segunda duda o temor de la ARPAS es por qué se introduce la "calidad técnica" como un requisito que en la ley actual es exclusivo para la telefonía. Temen que este criterio sea utilizado para aplicar sanciones arbitrarias a medios de comunicación de radio y televisión.

3. Otro requisito: "viabilidad jurídica"

En tercer lugar les preocupa la condición de "viabilidad jurídica" en procesos de fragmentación o desfragmentación de frecuencias del espacio radioeléctrico.

4. Acaparamiento de frecuencias en desuso

La cuarta preocupación es que la propuesta de reforma podría favorecer a acaparadores de frecuencia o retenedores ilegítimos. Esto ocurre porque la reforma dejaría de exigir que las frecuencias tengan una continua "programación variada y contenidos diversos" y solo exigirá que "transmisiones electromagnéticas". Esto permitiría que un propietario pueda tener frecuencias que, por ejemplo, únicamente transmitan barras en televisión sin que su concesión sea revocada.

Esto ocurre porque una de las razones o causales para que quiten o revoquen una frecuencia de radio, televisión o telefonía es que no sea utilizada durante seis meses consecutivos.

ARPAS ha solicitado que la Comisión de Economía haga un debate abierto de las reformas propuestas con la participación de los concesionarios actuales, entre quienes están los medios comunitarios, organizaciones académicas. Así mismo, piden que la Siget procure la democratización de frecuencias, otorgando concesiones a medios comunitarios mediante concursos transparentes, equitativos y democráticos.