El Salvador ha descendido seis lugares en la categoría de “representación” cuyo índice bajó de 0.54 a 0.52. También disminuyó en el resto de categorías evaluadas en el mundo: derechos, de 0.38 a 0.34; Estado de Derecho, de 0.34 a 0.33; y en participación, de 0.47 a 0.44.
El estudio mide el estado de la democracia a partir de 28 conceptos en 173 países. Evalúa cuatro categorías: representación, derechos, participación y Estado de derecho.
Cada índice oscila entre 0 y 1, siendo 1 el desempeño más democrático. Los países se clasifican en tres niveles, alto desempeño (0.7-1), medio (0.4-0.69) y bajo (0.39 o menos), es decir, El Salvador se ubicaría en un desempeño “medio”.
El informe señala que el presidente Nayib Bukele “sigue siendo uno de los líderes latinoamericanos más populares, a pesar del encarcelamiento de decenas de miles de personas y de las violaciones al debido proceso perpetradas como parte de la estrategia de su gobierno contra las pandillas”.
En general, advierte un retroceso democrático, en los sistemas de pesos y contrapesos y en las libertades constitucionales dentro de sociedades supuestamente democráticas. Así mismo, indica que “líderes que dicen hablar en nombre del pueblo” suelen justificar el debilitamiento del sistema democrático”, “alegando” la seguridad y el orden.