El Salvador hizo una reserva a la “Declaración sobre la opinión consultiva de la Corte Internacional de Justicia sobre las obligaciones de los Estados con respecto al cambio climático”, aprobada el 6 de agosto por el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA).
El Salvador, según la declaración, estableció una reserva que indica que “la situación jurídica del Estado salvadoreño” en relación a la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar y actuaciones de sus órganos, “no se verá afectada por el apoyo otorgado a la presente resolución”.
En la declaración, se detalla que el gobierno de El Salvador reconoció que “el cambio climático es una amenaza apremiante para el futuro de la humanidad” y manifiesta su “disposición” para promover políticas para mitigar sus causas y adaptarse a sus efectos.
Estados Unidos no se sumó a la declaración, ya que incluye afirmaciones “que son incompatibles con las posiciones de Estados Unidos” sobre el cambio climático y los derechos humanos. “Esta declaración es fundamentalmente defectuosa y no la apoyamos ni desde el punto de vista procedimental ni desde el punto de vista sustantivo”, indicó. Le pidió al Consejo Permanente de la OEA evitar “distracciones innecesarias en cuestiones que carecen de consenso”.
La Corte Penal Internacional, según los artículos de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (Convemar), indicó que los Estados están obligados a actuar “con la debida diligencia para prevenir la contaminación marina, proteger ecosistemas raros o frágiles y adoptar un criterio de precaución con respecto a los daños ambientales”.
El 23 de julio, la CPI emitió una opinión consultiva sobre que el “incumplimiento de las obligaciones jurídicas internacionales en materia de cambio climático constituye un hecho internacionalmente ilícito por parte de los Estados responsables, lo que da lugar a consecuencias jurídicas”, como el cese del hecho ilícito, garantías de no repetición y reparación en forma de restitución, indemnización y satisfacción.
En la declaración, el Consejo Permanente de la OEA hizo un llamado a todos sus Estados miembros a tomar medidas con todos los proyectos importantes de desarrollo e infraestructura relacionadas a derechos humanos y grupos vulnerables, integrar consideraciones climáticas y de derechos humanos en las leyes, entre otros.