Luis Parada asegura que ser presidente de la República es un deseo que tuvo hace seis años desde que vio un vacío peligroso en la toma decisiones del gobierno de Salvador Sánchez Cerén, un expresidente del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) señalado de corrupción en El Salvador y asilado en Nicaragua.

Parada rechaza que haya estado en “una burbuja” en Washington porque cree que ha aportado más a El Salvador desde fuera de lo que pudo haberlo hecho como gerente de seguridad de una empresa.

Tanto Parada como su compañera de fórmula, Celia Medrano, son optimistas y auguran que derrotarán a Nayib Bukele en 2024. Sin embargo, advierte que después de las elecciones, si es derrotado, continuará en la política salvadoreña.

¿Cómo tomaron la decisión de ser candidatos?, ¿por qué quieren gobernar El Salvador?
Celia Medrano (CM): No buscamos estas candidaturas. Esto tiene alrededor de tres meses que representantes de organizaciones de sociedad civil y movimientos sociales se nos acercaron para proponernos que estábamos siendo valorados como propuestas presidenciales. En un primer momento los dos dijimos que para nosotros era complicado asumir un reto de esta naturaleza, estábamos en el desarrollo de nuestras respectivas carreras profesionales, pero cuando nos dimos cuenta de que muchas personas tenían expectativas altas de que, ofreciendo una fórmula presidencial diferente, podía mucha gente animarse a tomar decisiones en el ejercicio del derecho no solo de participar en política sino también fungir en la aspiración de cargos...

¿Quién tomó primero la decisión?
CM: Fue una decisión de ambos. No se sabía quién tendría la candidatura a presidente o presidenta y quién a vicepresidente, y la actitud de los dos fue si Celia es la candidata a Presidente, ‘yo soy tu vicepresidente’ y yo le dije lo mismo. Para nosotros no es lo fundamental en este momento de coyuntura política el cargo en sí, sino la apuesta por ofrecer una alternativa diferente de personas, (con) trayectoria diferente. Conocíamos de nuestras trayectorias, nos habíamos conocido en diferentes debates y páneles, pero no nos conocíamos si teníamos todas las características o el arrojo necesario. Bastó esa conversación para darnos cuenta que sí podía funcionar.

¿Cómo tomó la decisión, Luis?, ¿ya había sido un deseo suyo candidatearse como Presidente antes?
Luis Parada (LP): Fue un deseo que tuve hace seis años cuando veía el gran vacío peligroso en la toma de decisiones al más alto nivel del gobierno de Sánchez Cerén, vine a querer participar en la política para ser Presidente y me inscribí en un partido buscando la posibilidad de buscar una candidatura pero no fue posible. Ese deseo mío de colaborar pero lo abandoné consciente de que una golondrina no hace verano, me decía mi mamá, siempre fui idealista, dedicarme para el bienestar de las otras personas, eso es lo que me mueve a mí, no para mí, no para mi familia, sino para la gente en general.

El problema es este: estamos tratando de actuar justamente en un sistema que ya está hecho para actuar injustamente, porque todo responde al dictado de una persona”.
Luis Parada
Candidato a Presidente



¿Por qué querría ser presidente de un país al que dejó hace tantos años?
LP: Yo emigré pero no es que dejé abandonado el país, al contrario, yo creo que he hecho mucho más por el país estando afuera que lo que podría haber hecho quedándome adentro porque, cuando yo salí, salí a reinventarme como bastantes inmigrantes salvadoreños que se van de aquí a iniciar una nueva vida y, a pesar que yo ya tenía un título universitario y una profesión, llegué a reinventarme a estudiar a la edad de 37 años. Yo estaba con una mochila, trabajaba de día y de noche estudiaba derecho y, después de cuatro años, me gradué como abogado. Como abogado, le aporté muchísimo al país que lo que le pude haber aportado quedándome aquí como como gerente de seguridad. En estos 26 años he tenido un contacto directo con el país, he participado defendiendo al Estado salvadoreño, no a ningún gobierno, sino al Estado de El Salvador en cuatro arbitrajes internacionales que han tenido excelentes resultados... Realmente dije ‘no, hombre, si esta gente puede ser Presidente, yo creo que yo podría ser mucho mejor trabajo’.

¿No considera que ha estado en una burbuja en Washington alejado de la realidad salvadoreña?
LP: No, no. Hay gente que vive acá y que está alejada de la realidad salvadoreña. El que tú vivas en un lugar no significa que estás compenetrado de la realidad de otra gente que no está en tu mismo nivel pero yo me identifico con toda la gente pero más con la gente sencilla. Desde que yo estaba en la Fuerza Armada, cada vez que veía a un campesino, veíamos una familia que solamente subsistía con la milpa chiquita y no tenían qué comer, nos sacábamos la comida de la mochila y se las regalábamos a la gente. Por eso es que dejé a mi familia, para venir a tratar de darle una opción nueva, diferente, una mejor opción a los salvadoreños.


¿Se quedará en el país de aquí hasta el día de elecciones? y ¿cuál es su plan después de las elecciones?
LP: Van a haber dos momentos antes de la elección. Cuando ya comience la campaña, ya voy a hacer acá casi todo el tiempo, sin descuidar tampoco estar allá porque gran parte de la población reside fuera de El Salvador y en Washington es donde yo resido. Hay bastantes personas interesadas en ayudarle a El Salvador, aunque no sean salvadoreñas con las que yo tengo que mantener contacto para lo que viene después. Mi presencia física está repartida en partes iguales pero gradualmente va a llegar a estar más tiempo acá en El Salvador.

Después de la elección, hay tres escenarios, uno es que obtengamos la victoria en primera vuelta, otro es que nos tengamos que ir a segunda vuelta y el tercero es que no tengamos la victoria electoral. Estoy convencido que en segunda vuelta obtendríamos la victoria electoral. Eso nos lleva a Casa Presidencial el 1 de junio del 2024. Si no existiera esa posibilidad, no estaríamos acá. Si es el gobierno actual que se reelige inconstitucionalmente es otro escenario. Independientemente de cualquiera de esos escenarios, yo estoy comprometido de estar participando en esta lucha. Esta lucha no es una lucha que termina el 4 de febrero o en segunda vuelta, es una lucha que continúa, ya sea desde el gobierno o continuando la oposición a un gobierno inconstitucional ilegítimo, que se instauraría si el actual presidente se reelige inconstitucionalmente. Primero hay que ver si el Tribunal Supremo Electoral lo inscribe, no debería inscribirlo pero, si lo escribe y él gana la elección, continúa esa lucha.

Lo que queremos es darle a El Salvador a los salvadoreños la opción de tener un gobierno que por primera vez tenga como eje central interesarse por el bienestar de los salvadoreños dentro de un sistema democrático.

Para nosotros no es lo fundamental en este momento de coyuntura política el cargo en sí, sino la apuesta por ofrecer una alternativa diferente de personas que tienen una trayectoria diferente”.
Celia Medrano
Candidata a Vicepresidenta



¿Usted no se va a retirar de la vida política aunque sea derrotado en elecciones?
LP: No, no. Depende, si es un candidato legítimo, con una candidatura constitucional, no le vería el mismo escenario a si es un candidato inconstitucional, que estaría liderando un gobierno ilegítimo, entonces, sí, ahí mi compromiso con continuar la resistencia. Yo lo tomo esto de esta forma: han pasado los años pero dentro de mí existe el mismo idealismo en este joven de 19 años que estando en una entrevista a un periódico del estado de Oregon en Estados Unidos que quería entrar a la Fuerza Armada porque quería hacerlo lo más que pudiera por su país. Yo sabía que estaba ingresando a una institución militar que había sido instrumentalizada para mantener un sistema autocrático, dictatorial, que era insostenible en el tiempo. Yo veía venir el conflicto armado desde los 16 años que decidí que iba a ingresar a la Fuerza Armada y fue una sorpresa para todos.


¿Por qué eligió la vía militar?
LP: Porque ahí estaba el poder político y era el mayor obstáculo para un cambio, la guerra se da porque se cerraron las vías democráticas para hacer los cambios que necesitaba el país. Desde que en 1972 hubo un fraude electoral para imponer a un candidato del partido oficial en contra de la voluntad del pueblo, en contra del ingeniero (José Napoleón) Duarte, que tuve la oportunidad de conocer. Se selló en 1977, que volvió a haber otro fraude electoral, se cerraron las puertas para hacer los cambios estructurales que necesitaba El Salvador. Tuve la oportunidad de tener bastante influencia en decisiones del Alto Mando de la Fuerza Armada. Te digo, si yo volviera a nacer, volvería.

¿Ingresó a la Fuerza Armada con la idea de optar por la guerra o con la idea de paz?
LP: No; yo sabía que íbamos a una guerra pero no soy guerrerista ni mucho menos; con la idea que yo podía hacer lo más posible para cambiar algunas actitudes, mentalidades, dentro de la Fuerza Armada, que hicieron posible ese cambio, ese reencuentro que se da en los Acuerdos de Paz de 1992.

Sería muy hipócrita que este gobierno diga que está luchando contra la corrupción de hace 20 o 30 años y está cometiendo iguales o peores actos de corrupción actualmente”.
Luis Parada
Candidato a Presidente



Nuestro Tiempo tiene 0.2 % de intención de voto contra el 70 % de Nuevas Ideas según la encuesta de la Universidad Francisco Gavidia. ¿Puede alcanzar a Bukele en cinco meses?
LP: Claro que sí. La gente estaba necesitando y buscando una opción y bastante. Ahora que ya hay no solo una opción diferente, hay otras, las cosas van a cambiar y pueden cambiar mucho más aceleradamente por sucesos externos y nuestras mismas acciones. Nuestro proyecto no es solamente electoral, va más allá de crear las condiciones para que El Salvador se enrrumbe nuevamente en un camino democrático donde no sea una persona o un grupo pequeño el que dicta a todo mundo lo que va a pasar.

¿Qué harían ustedes con los 71,000 detenidos en el régimen de excepción?
CM: Garantizar el debido proceso legal de cada una de estas personas, ni siquiera en el contexto de un régimen de excepcionalidad puede violarse el derecho al debido proceso y es garantizar que una persona sea detenida cuando hay elementos suficientes que ameriten que se le inicie un proceso legal y que haya un proceso con un juez independiente, que le garantice un juicio justo; no está pasando esto en ese momento. Ni siquiera en una condición de régimen de excepcionalidad puede impedírsele a una persona acusada de un delito que no tenga inmediatamente la atención de un abogado o abogada defensora, esto se está violentando todos los días. Una acción inmediata debería ser garantizar jueces independientes a las órdenes de los grupos de poder que controlan Casa Presidencial. Lo primero que habría que plantearnos es garantizar jueces independientes que no obedezcan al pie de la letra una medida que es el instrumento principal de proselitismo electoral para la reelección presidencial. Lo primero es corregir que nadie que sea inocente, que nunca debió haber estado preso o presa, continúe en la cárcel. Eso no es defender delincuentes, eso es defender inocentes y, para que nadie inocente tenga que pasar un año injustamente sufriendo vejaciones en una cárcel, se necesitan tribunales independientes.

Celia Medrano y Luis Parada, candidatos a vicepresidenta y presidente, respectivamente, por el partido Nuestro Tiempo. / F.V.
Celia Medrano y Luis Parada, candidatos a vicepresidenta y presidente, respectivamente, por el partido Nuestro Tiempo. / F.V.



Si son procesos indebidos, ¿implicaría que todos los juicios son nulos, hayan sido pandilleros o no, y que salgan libres?
CM: Esas decisiones las tienen que tomar jueces independientes. El deber que uno tiene que garantizar es que haya tribunales independientes. Qué es lo que está pasando ahora: los jueces que aún quieren impartir justicia como la ley les mandata tienen miedo, los van a despedir, los van a destituir. Si no tenemos la garantía de que usted y yo se nos acuse, arbitrariamente, ilegalmente, de un delito, si no tenemos la garantía de un tribunal independiente justo, nadie está a salvo de una arbitrariedad. No soy yo quien va a decir quién es inocente y no.

¿Cómo resolverían el problema de que hay 70,000 personas capturadas y es probable que muchos sean pandilleros pero no hay quizás una prueba científica de cada uno de los delitos que han cometido?
LP: Para que la gente no tenga temor, el 1 de junio de 2024, si nosotros ganamos la Presidencia y asumimos la Presidencia, no vamos a soltar a toda la gente que está capturada. Eso no va a suceder, ni el primer día, ni el segundo día, ni el tercer día, lo que sí vamos a impulsar es que se realice por parte del sistema judicial, lo que sí vamos a hacer detener completamente cualquier nueva captura arbitraria porque ha habido capturas arbitrarias que no tienen nada que ver con las pandillas; de personas que están protestando, sindicalistas que no se les ha pagado su salario o la gente de Santa Marta porque les han aplicado el régimen de excepción y están detenidos desde hace más de seis meses y no les ha permitido ver a su abogado en los últimos cuatro meses, por su oposición a la minería metálica.

Esos son casos claros de gente que no debería estar ahí, debía estar en su casa, pero vamos a dejar de hacer eso. Eso es lo primero porque eso sí depende del Ejecutivo, a través de la Policía Nacional Civil, que deje de hacer haciendo capturas arbitrarias por razones no justificables bajo los motivos de darle seguridad a la gente al pueblo salvadoreño.

Con respeto a la gente que está detenida, de una manera inicial se puede hacer una división entre los que verdaderamente son pandilleros y los que no hay evidencia. Impulsaríamos una revisión inicial acelerada para poder sacar gente que obviamente nunca debió haber sido capturada. Porque eso de hacer capturas arbitrarias solo porque ‘me han dado una cuota, los primeros 10 jóvenes de zonas pobres que me encuentre los voy a capturar y les voy a decir que tienen asociaciones ilícitas’, cuando hay gente que claramente no tiene vinculación, esas personas deberían quedar libres.

El problema es este: estamos tratando de actuar justamente en un sistema que ya está hecho para actuar injustamente, porque todo responde al dictado de una persona, entonces, tanto la Fiscalía, que debería ser independiente, en la práctica, está supeditada al Presidente de la República; los jueces, que deberían ser independientes, están siguiendo las instrucciones de la Fiscalía, que recibe las instrucciones del Presidente, entonces, es un sistema que está viciado y está diseñado para impartir una injusticia arbitraria. Pero no vamos a sacar a los pandilleros.

Si no tenemos la garantía de que usted y yo se nos acuse, arbitrariamente, ilegalmente, de un delito, si no tenemos la garantía de un tribunal independiente justo, nadie está a salvo de una arbitrariedad. No soy yo quien va a decir quién es inocente y no”.
Celia Medrano
Candidata a Vicepresidenta



¿Y el 27 de marzo de 2022, después de estos tres días violentos, usted hubiera aprobado el régimen de excepción?
LP: Si yo hubiera sido presidente, eso no habría ocurrido primeramente. Esos tres días violentos, 25, 26 y 27 de marzo, en que los pandilleros asesinaron a 87 salvadoreños inocentes, se dieron como resultado del rompimiento de un pacto oscuro, secreto, ilegal, del gobierno actual con las pandillas; eso no habría ocurrido porque yo no habría tenido un pacto oscuro, secreto e ilegal con los pandillas.

Ese rompimiento, si tú lees bien la evidencia que ya ha salido a través de reportajes y audios de entrevistas con pandilleros, el incidente que provocó esa reacción de esos 87 asesinatos fue provocado intencionalmente por el mismo gobierno, no habría ocurrido tampoco. Eso fue lo que llevó al régimen al día siguiente. Eso no habría pasado, eso fue la excusa.

En una situación normal, donde no ha habido pacto con pandillas, ni se rompe por un incidente provocado por el mismo gobierno, si se hubiera dado ese incidente, probablemente sí yo habría invocado un régimen de excepción y probablemente hubiera sido necesario extenderlo más que los primeros 30 días pero a lo sumo una vez más. Pero hacerlo un régimen permanente la misma Constitución te lo prohíbe.

¿Se puede seguir capturando pandilleros sin régimen de excepción?
LP: Sí. Yo veo la ventaja del régimen de excepción porque, cuando tú estás capturando bastantes pandilleros a la vez, no puedes cumplir con los tiempos de 72 horas para entregar al juez, tiene sentido ampliarlo a 15 días, tiene sentido decir que, cuando estás poniendo tantos pandilleros bajo custodia policial y luego no puedes estarle garantizando que le vas a dar un abogado a todos ellos, si no pueden como defenderse, es eso es algo natural...

Ahora el gobierno dice que todavía hay remanentes...
LP: Podría haber, pero el sistema ya no está saturado. La Constitución no te permite suspender la garantías constitucionales permanentemente como una política de seguridad. Yo creo que, con los instrumentos legales que existen ahorita, cualquier remanente puede ser procesado.

“Es una lucha que continúa, ya sea desde el gobierno o continuando la oposición a un gobierno inconstitucional ilegítimo, que se instauraría si el actual presidente se reelige inconstitucionalmente”.
Luis Parada
Candidato a Presidente



¿En qué cambiaría política exterior de El Salvador hacia los Estados Unidos?
LP: Yo no diría solamente hacia los Estados Unidos, cambiaría hacia el mundo, o sea, un acercamiento mayor con países democráticos y una clara condena a violaciones de derechos humanos a nivel internacional, acompañando a la comunidad internacional cuando hay agresiones de un país a otro, que ponen en peligro un sistema que ha mantenido la paz mundial por bastante tiempo y que ha sido un grave peligro, por ejemplo, la invasión de Rusia a Ucrania, todavía acciones más contundentes a mantener la paz mundial con la comunidad internacional.

¿El Salvador no debería abstenerse en estos temas?
LP: No, no, abstenerse es una cobardía. Esa invasión de Rusia a Ucrania pone en peligro no solo a los ucranianos, pone en peligro un sistema que ha garantizado hasta ahora bastante de la paz mundial por bastante tiempo.

¿Cuál es su opinión sobre esta nueva Lista Engel?
LP: En términos generales, es excelente que otros países reconozcan la importancia de la lucha contra la corrupción y que la denuncien, sin embargo, yo diría que el problema de la corrupción del actual es tal vez el más urgente de detener, está claro que debería de de atenderse corrupción de gobiernos anteriores, pero sería muy hipócrita que este gobierno diga que está luchando contra la corrupción de hace 20 o 30 años y está cometiendo iguales o peores actos de corrupción actualmente. No he visto la lista, pero sí creo que es bueno que la gente sepa que, años y décadas después, sus acciones no van a ser olvidadas. Es bueno que los corruptos sepan que sus acciones no serán olvidadas.

El perfil

Luis Parada, abogado. Estudios: Licenciado en seguridad nacional y asuntos públicos de la Academia Militar de West Point, con maestría en Gobierno y doctorado en derecho de la Universidad de Georgetown. Trayectoria: Salvadoreño de nacimiento con ciudadanía estadounidense. Militar retirado, renunció a su grado de capitán del Ejército luego de la toma militar de la Asamblea el 9 de febrero de 2020. Fue testigo y denunció encubrimiento de la masacre de la Uca. Como abogado ha ganado litigios a favor de inmigrantes universitarios y a favor del Estado salvadoreño contra una demanda millonaria de una minera.

Celia Medrano, defensora de derechos. Estudios: Periodismo y comunicaciones de la Universidad de El Salvador. Posgrado en derechos humanos en la Universidad de Ginebra, Suiza. Trayectoria: Fue parte de las Comunidades Eclesiales de Base, directiva de la Comisión de Derechos Humanos de El Salvador (CDHES) en los ochentas, fue cónsul de El Salvador, directora de derechos humanos en Cancillería, directora de programas de Cristosal y directiva del Conna.