La propuesta gubernamental de reforma al Sistema de Ahorro para Pensiones (SAP) mantiene las Cuentas Individuales de Ahorro para Pensiones (CIAP) en las cuales los trabajadores afiliados han ahorrado dos terceras partes de sus cotizaciones.

Un movimiento de sindicatos salvadoreños propuso en Casa Presidencial, el 7 de octubre de 2021, un sistema de reparto de pensiones que deposita los aportes de los cotizantes a un fondo común utilizado indistintamente para las pensiones de quienes se vayan jubilando.

Actualmente funciona un sistema de ahorro que reúne una cotización equivalente al 15 % del salario correspondiente: 7.75 % aportado por los empleadores y 7.25 % aportado por los trabajadores. El gobierno ha propuesto subir esta cotización al 16 %, aumentando en 1 punto el aporte de los empleadores.

Según las explicaciones verbales del gobierno, en lugar de suprimir las cuentas individuales, subiría el ahorro de las mismas, ya que actualmente reciben el 8.1 % del salario y recibirían el 9 %, un aumento de 0.9 puntos de un salario.

La propuesta gubernamental tampoco suprime la Cuenta de Garantía Solidaria (CGS) creada en 2017 para garantizar las pensiones mínimas vitalicias a los afiliados del SAP y hacia la cual se aumentaría el aporte del 5 % al 6 % del salario.

No nacionalizarán.

La propuesta del gobierno fue presentada a la Asamblea Legislativa la noche del viernes 25 de noviembre de 2022. Cuatro años antes, el 16 de noviembre de 2018, Nayib Bukele era candidato presidencial y prometía ante estudiantes de la Universidad de El Salvador (UES) “empezar a desmontar el modelo neoliberal” y empezar “una verdadera reforma del sistema de pensiones que revertirá las consecuencias de la última reforma”.

De acuerdo al ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, quien entregó el paquete de reformas, no se nacionalizará el sistema y las Administradoras de Fondos para Pensiones (AFP) continuarán.

El ministro aseveró que la comisión por administración a las AFP disminuiría de 2 % al 1 % y que estarían controladas por el nuevo Instituto Salvadoreño de Pensiones (IPS) conformado por representantes del gobierno y de los sectores laboral y empleador. El IPS sería el ente rector que verificaría que las AFP cumplan sus obligaciones y que absorbería las funciones del actual Instituto Nacional de Pensiones de los Empleados Públicos (INPEP).

¿Dónde están los ahorros?

Hasta esa fecha los ahorros para las pensiones suman $13,920.6 millones, de los cuales hay disponibles $137.5 millones, $1,138.5 millones están en cuentas por cobrar y $12,644.6 millones están invertidos en diferentes instrumentos.

Un total de $9,481.4 millones están invertidos en instrumentos de instituciones públicas; $972.1 millones están invertidos en valores extranjeros, $745.1 millones en fondos de titularización, $570.2 millones en instrumentos de bancos, $143.1 millones en fondos de inversión y $10.3 millones en instrumentos de sociedades nacionales. En el Fideicomiso de Obligaciones Previsionales (FOP) están invertidos $722.4 millones.

Más de tres millones de salvadoreños han cotizado alguna vez en los sistemas, sin embargo, actualmente (hasta agosto) solo 827,680 salvadoreños cotizaban al Sistema de Ahorro de Pensiones (SAP) a través de las dos AFP y 3,821 al Sistema de Pensiones Público (SPP) a través del ISSS y del INPEP.

La población que efectivamente cotiza a un sistema de pensiones es apenas el 28.4 % de la Población Económicamente Activa salvadoreña.

En El Salvador, los sistemas público y privado otorgan pensiones actualmente (hasta agosto de 2022) a 196,816 pensionados: 118,771 por vejez, 3,429 por invalidez y 74,616 por sobrevivencia.

El dato

El artículo 77 de la ley actual de pensiones dice que cada Fondo de Pensiones es propiedad exclusiva de los afiliados, incluida la rentabilidad, independiente y diferente del patrimonio de la administradora.

La propuesta de pensiones según el ministro de Hacienda: el proyecto aún no es publicado

1.- Un incremento de pensiones

Realizarían un ajuste a la mayoría de afiliados, “de tal suerte que la gran mayoría de (unos 53,000) usuarios recibirán $400” como pensión mínima.

2.- Aumento de la cotización
La cotización al Sistema de Ahorro para Pensión subiría del 15 % al 16 % del monto salarial, aumento que absorbería el empleador o patrono, de 7.75 % al 8.75 % del salario.

3.- Comisión de las AFP
Supuestamente bajaría un punto. Actualmente es 1.9 % (1 % a seguro de pensión de sobrevivencia e invalidez y 0.9 % a comisión por administración). El seguro será cargado al Fondo de Garantía Solidaria.

4.- Sube aporte a la cuenta individual
Actualmente, del 15 % de cotización al sistema de pensiones se destina un 8.1 % del salario a la cuenta individual (CIAP) del trabajador. Dicho aporte aumentaría al 9 %.

5.- Sube aporte a la cuenta colectiva
Actualmente, del 15 % de cotización se destina 5 % a la Cuenta de Garantía Solidaria para pagar pensiones mínimas o de longevidad. Dicho aporte aumentaría al 6 % con la reforma.

6.- más rentabilidad
El gobierno no ha dicho cómo se subirá la rentabilidad del ahorro. En 2021 vetó el decreto que subía la rentabilidad de los Certificados de Inversión Previsionales (CIP) argumentando que requería $1,088.96 millones e implicaba deuda.

7.- Sin devolver el anticipo sin excepciones
Por una reforma de noviembre de 2020 se permite actualmente no devolver el anticipo por desempleo, discapacidad o enfermedad (reforma de noviembre 2020). El gobierno propone quitar totalmente la obligación.

8.- Prohibición legal
El gobierno dice que prohibirá que el Estado use los ahorros de pensiones. En 2006 la ley FOP lo autorizó a emitir deuda que debía se comprada por los fondos de pensiones en hasta 45 %. La Sala declaró inconstitucional el aumento al 50 %.

9.- Un nuevo Instituto
Se crearía el Instituto Salvadoreño de Pensiones (ISP). Fiscalizaría a las AFP y tomaría funciones del Instituto Nacional de Pensiones de los Empleados Públicos (INPEP). Se desconoce si asumirá funciones de la Superintendencia de Pensiones.

10.- ¿Cobertura?
La explicación verbal de la reforma no indica una ampliación de cobertura, excepto que los salvadoreños con domicilio en el extranjero podrán de manera voluntaria cotizar al sistema. Los sindicalistas proponían una ampliación de la cobertura.