Christian Guevara, jefe de fracción de Nuevas Ideas.


El diputado Christian Guevara, jefe de fracción de Nuevas Ideas manifestó que el proyecto de Ley de Agentes Extranjeros que estudia la comisión de Relaciones Exteriores, pretende cortar los “jugosos salarios” que reciben los periodistas de investigación salvadoreños que trabajan con cooperación internacional.

En declaraciones que Guevara brindó solamente a canal 21, ITV internacional, radio YSKL Diario El Salvador y canal 10, señaló que el impuesto de 40% que se cobraría a Organizaciones No Gubernamentales (ONG) por recibir donaciones extranjeras se “traducirá en obras para el pueblo”.
Lo que se les van a acabar son esas organizaciones que vivían enteramente de esos fondos, del 100 % de esos fondos, incluidos organizaciones como Open Society y ellos van a pagar el 40 %, se les acabaron sus sueldos, sus jugosos salarios, hay salarios de esos periodistas que están financiados por esas organizaciones de hasta $4,000, $5,000, ustedes saben que un periodista no es eso, es 500 %, 1,000 % más de lo que está ganando un periodista normal, hay fondos de esos que se utilizaron para financiar marchas, eso ya no se va permitir”. Christian Guevara, diputado de Nuevas Ideas.

Guevara reiteró que hay oenegés que usaron fondos internacionales para financiar marchas en contra del presidente Nayib Bukele. “Nosotros vamos a hacer lo que países de primer mundo hacen, no lo que los países del primer mundo nos dicen”, añadió el diputado.

La Ley de Agentes Extranjeros, solicitada por el Gobierno el pasado martes 9 de noviembre, prohibirá a las organizaciones realizar actividades para fines políticos u otros para “alterar el orden público” o que pongan en riesgo la seguridad nacional, estabilidad social y política del país.

También, obliga a los agentes extranjeros o las organizaciones que reciben fondos de los mismos a rendir cuentas sobre los fondos y sus destinos, así como entregar la información no solo al registro de Gobernación, sino a la Fiscalía General de República.

Así mismo, crea un impuesto del 40 %, excepto entidades diplomáticas, cooperación, humanitarias o que financien actividades de salud, religiosas, escolares, académicas o científicas de buena fe. Estas organizaciones estarían exentas del impuesto pero no están exentas de la prohibición de no realizar actividades que arriesguen la estabilidad política.