"Creo que la voz tiene el potencial de ser una de las formas, si no la más frecuente, en que interactuamos con la IA", dijo su CEO, Mark Zuckerberg, durante Meta Connect, el evento anual de lanzamiento de productos de la empresa en Menlo Park, California.
La IA de Meta, similar a ChatGPT o Gemini de Google, responde preguntas, crea imágenes, escribe mensajes e incluso proporciona compañía.
El lanzamiento se produce después de la polémica función de voz ChatGPT de OpenAI, criticada por su parecido con la voz de la actriz Scarlett Johansson. En este caso, Meta obtuvo el permiso de las celebridades.
Debido a las leyes de protección de datos de la Unión Europea, Meta AI, que se basa en los datos de los millones de usuarios de sus plataformas, no será accesible en Europa, donde podría ir en contra de las leyes de protección de información.
La empresa informó de que más de 400 millones de personas ya utilizan Meta AI mensualmente.
La competencia en el campo de la IA es feroz, con Google y Microsoft a la cabeza en funciones de productividad y Apple entrando en el mercado con iPhones con capacidad de IA.
Estos desarrollos requieren importantes recursos, lo que repercute significativamente en los presupuestos de las empresas.
A pesar de la preocupación por el fuerte gasto en IA y realidad aumentada, los beneficios y el precio de las acciones de Meta se han disparado gracias a los buenos resultados publicitarios en Facebook e Instagram.
Para la analista Carolina Milanesi, de Creative Strategies, la percepción de "privacidad y confianza" sigue siendo el "gran reto" de la IA de Meta.
La firma también presentó avances de sus gafas de realidad aumentada "Orion", que parecen convencionales pero pueden mostrar mensajes de texto y aplicaciones holográficas, y realizar videollamadas en el campo de visión del usuario.
Aún faltan años para que el producto vea la luz, pero Zuckerberg lo ve como una posible alternativa manos libres a los teléfonos inteligentes.