La vida de Brennan Gilmore cambió radicalmente el 12 de agosto de 2017.

Ese día, este estadounidense filmó con su teléfono celular el momento en que un hombre con ideas neonazis y racistas atropelló con su automóvil a una multitud que protestaba al margen de una manifestación de supremacistas blancos en Charlottesville. Una mujer murió y otras 19 personas resultaron heridas.

Gilmore decidió compartir en Twitter el video después de que medios de comunicación dejaron entrever que todo había sido un accidente, cuando según él fue claramente "muy deliberado".

Entonces comenzó el ciberacoso. Recibió desde amenazas de muerte hasta acusaciones de nexos con el "deep State", o gobierno en la sombra, y otras teorías conspirativas de las que supuestamente era protagonista.

Gilmore, de 38 años y funcionario del servicio exterior estadounidense, decidió contraatacar: este mes demandó a varios sitios web de extrema derecha por difamación, incluidos Infowars, dirigido por Alex Jones, y Gateway Pundit.

"El veneno que está contenido en estas historias afecta a mucha gente", dijo Gilmore a la AFP. "Mi vida se ha visto trastornada por esto".

Primero, después de que Gilmore publicó su filmación, aparecieron mensajes amenazantes en las redes sociales y la dirección de sus padres se hizo pública.

Luego, el Gateway Pundit publicó un artículo cuestionando por qué Gilmore estaba en la manifestación y alegando que tenía vínculos con el "deep State", un término que usa la extrema derecha vernácula para describir lo que considera un presunto grupo liberal que opera desde el corazón del gobierno federal para socavar al presidente Donald Trump.

Y más tarde Infowars acusó a Gilmore, que fue enviado durante varios años a África por el Departamento de Estado y trabajó el año pasado para un candidato demócrata a gobernador del estado de Virginia, de tener vínculos con la agencia de espionaje CIA.

Fox News informó sobre las acusaciones de que Gilmore había orquestado lo ocurrido en Charlottesville.

"Para el viernes de esa semana, había un congresista estadounidense en Fox News que sugería que los sucesos en Charlottesville habían sido parte de una conspiración izquierdista para que las legislativas de mitad de mandato de 2018 estuvieran centradas en cuestiones de raza", contó Gilmore.

- Pesadilla sin fin -

Gilmore sabe que hay historias que se vuelven virales en internet, y que a veces eso puede ser desagradable. Pero en su caso dice que fue más allá del hostigamiento: de "trozos de información se construyó una enorme red de mentiras y se difundieron".

Infowars y Gateway Pundit fueron algunos de los sitios web que alimentaron los rumores acerca de que una pizzería de Washington era una fachada para una red de tráfico sexual infantil que involucraba Hillary Clinton, rival de Trump en los comicios de 2016.

También divulgaron una acusación de que el gobierno del predecesor de Trump, Barack Obama, organizó el mortal tiroteo en la escuela Sandy Hook en Connecticut en 2012.

Gilmore dice que la pesadilla no tiene fin. Cada pocos días salen nuevos videos que pretenden probar que todo lo que mostró sobre Charlottesville era una mentira y que está en connivencia con el "Estado profundo".

"Recibí una amenaza de muerte hace dos semanas", dijo.

El abogado de Gilmore, Andrew Mendrala, explicó que la demanda por difamación apunta a "responsabilizar a los proveedores y generadores de noticias falsas por las consecuencias reales de sus acciones".

"Brennan es solo un tipo que captó en video un ataque terrorista. No debería tener que pensar dos veces antes de compartirlo porque teme ese tipo de represalia en internet", agregó Mendrala, que enseña derecho en la Universidad de Georgetown.

"No estamos tratando de decir que Alex Jones (director de Infowars) no puede hablar en público sobre asuntos políticos y compartir su opinión sobre las cosas. Pero lo que no puede hacer es difundir información demostrablemente falsa que destruye la vida de alguien", explicó.

Más allá de todo, Gilmore quiere sentar un precedente. Dice que los estudiantes de secundaria de Florida que exigen un mayor control del porte de armas tras el mortal tiroteo en su escuela en Parkland están sufriendo el mismo acoso que él, convirtiéndose en blancos de la extrema derecha.

La 'alt-right' está diciendo "el mismo tipo de mentiras y atacándolos e intentando generar odio y violencia hacia ellos en internet y en la vida real", dijo Gilmore.

Gateway Pundit calificó la demanda de Gilmore como "una locura". Jones la desestimó como una operación de relaciones públicas.

"Usted es un político y se ha convertido en un vocero y debe ser investigado", dijo Jones, refiriéndose a Gilmore.