Facebook está en el centro de un escándalo que podría amenazar incluso su modelo comercial, tras conocerse que una empresa británica relacionada con la campaña de Donald Trump usó los datos personales de millones de usuarios.
La acción de Facebook se desplomó en Wall Street: sobre las 18H00 GMT caía un 6,5%, a 173,06 dólares.
Varias voces se alzaron exigiendo una investigación a ambos lados del Atlántico, luego de revelarse que la firma británica Cambridge Analytica (CA), especializada en comunicación estratégica, había usado los datos de 50 millones de usuarios de Facebook para desarrollar software para predecir e influir en los votantes.
La cuenta en Facebook de CA, que trabajó para la campaña de Trump, elegido presidente de Estados Unidos a fines de 2016, fue suspendida, según anunció la red social.
Facebook, pero también Twitter y Google, son acusadas desde hace meses de servir como plataformas para manipular a la opinión pública, particularmente por entidades vinculadas a Rusia durante la carrera presidencial estadounidense o el referendo del Brexit en 2016.
"Esta es una gran violación (de datos) que necesita ser investigada, y es obvio que estas plataformas (tecnológicas) no pueden autorregularse", dijo la senadora demócrata Amy Klobuchar, quien se suma a los que creen que el dueño de Facebook, Mark Zuckerberg, debe ir al Congreso a explicar lo sucedido.
En Reino Unido, el parlamentario Damian Collins, presidente de la comisión que trata los temas digitales, también dijo que exigirían explicaciones de Facebook y de CA.
La comisaria europea de Justicia, Consumidores e Igualdad de Género, Vera Jourova, dijo que el uso indebido de los datos de Facebook por parte de una firma política sería "horrible" si se confirma y anunció que abordará el tema esta semana en Washington.
- "Problemas sistémicos" -
Según expertos consultados por AFP, esta nueva controversia podría aumentar la presión por reglas más estrictas sobre el uso de datos, corazón del modelo de negocios de Facebook.
Para Brian Wieser, analista de Pivotal Research, estas revelaciones sacan a la luz "problemas sistémicos en Facebook". Aunque no deberían tener un impacto inmediato en las finanzas de la red social, "refuerzan" los "riesgos", dijo.
La investigación conjunta de los diarios The New York Times y The Observer indicó que CA pudo crear perfiles psicológicos en 50 millones de usuarios de Facebook usando una aplicación de predicción de la personalidad que fue descargada por 270.000 personas, pero también recogió datos de amigos de los usuarios.
CA negó cualquier uso indebido de datos. Facebook suspendió la firma el viernes, pero negó que haya sido una masiva violación de datos, sugiriendo que el problema afectaría a un número mucho menor de usuarios.
Facebook anunció el lunes que contrató a la firma Stroz Friedberg para realizar "una auditoría exhaustiva" de CA. Además, dijo que el psicólogo de la Universidad de Cambridge Aleksandr Kogan, que desarrolló la aplicación utilizada para recopilar datos de usuarios, también acordó cooperar. CA no está vinculada a la Universidad de Cambridge pese a llevar ese nombre.
Jennifer Grygiel, especialista en redes sociales de la Universidad de Syracuse, también cree que la polémica generada aumentará la presión sobre Facebook y otras empresas de redes sociales.
"La autorregulación no está funcionando", explica.
Para ella, este escándalo es el resultado de normas demasiado "leves", que permitieron a Facebook y sus socios usar datos de manera descontrolada. "A eso deben su crecimiento, no fue un error", dijo.
- Crisis existencial -
Algunos analistas señalaron que esto plantea una crisis existencial para Facebook debido a cómo reúne y utiliza datos sobre sus 2.000 millones de miembros.
Para Daniel Kreiss, profesor de medios y comunicación de la Universidad de Carolina del Norte, en Estados Unidos, Facebook no entendió la diferencia entre publicidad comercial y propaganda política.
"Que Facebook parezca no diferenciar entre vender zapatillas y vender un programa presidencial es un gran problema", opinó.
Facebook y otros grupos tecnológicos pronto tendrán que lidiar con nuevas leyes de datos privados, como la regulación general de protección de datos de la Unión Europea en mayo, señaló David Carroll, profesor de la Parsons School of Design.
"Facebook y Google tendrán que pedirles a sus usuarios más permisos para usar sus datos", dijo. "Y mucha gente se negará, así que creo que esto tendrá un gran impacto en estas compañías", agregó.