Una familia entregó al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) una iguana que habían comprado y ya no deseaban tener como mascota.
De acuerdo con el MARN, el reptil era alimentado con pollo y otros alimentos no adecuados para su especie.
"Las iguanas son herbívoras, es decir, se alimentan solo de vegetales", señaló la institución.
La iguana será adaptada a su hábitat natural antes de ser liberada.
Las autoridades hicieron un llamado a la población a no comprar especies en peligro de extinción.