Helena Fernández no tiene ningún problema en aceptar que sus tatuajes son "mal hechos", incluso su cuenta de Instagram se llama de esta forma.
Fernández ha bautizado su técnica como "tatuagens peba", cuya traducción sería "tatuajes basura".
A pesar de sus feos diseños, ha logrado tener una buena aceptación de parte del público y asegura que cada vez son más los que se acercan a su estudio para tatuarse.
Los precios de sus tatuajes rondan entre 30 y 60 dólares aproximadamente, pero en su Instagram ofrece descuento de $2.00 a roqueros y otakus.