Si esperas con ansias para que lleguen los viernes pero no porque planeas salir de fiesta, sino porque tu ¨adorada¨ cama te espera para descansar, no cabe duda que te has convertido en una abuelita, aunque tu apariencia no lo sea. Acá te damos otras señales:
1. En tu mochilla llevas todo tipo de medicamentos:
Todos tus amigos saben que eres un ¨botiquín andado¨ y recurren a ti cuando sienten alguna molestia física para que les des alguna pastilla.
2. Te ha nacido por el amor a las plantas:
Tienes una colección de plantas que va incrementado, e incluso ya les pusiste nombres a cada una.
3. Te gustan las canciones de otras épocas distintas a la tuya:
Les dices a todos que te gustan las canciones de ¨señoras¨ y crees que debiste haber nacido en otra época, porque prefieres las canciones ¨viejitas¨.
4. Viernes por la noche, sinónimo de descanso:
Te mueres de ganas porque llegue el viernes, solo para poder tirarte en tu cama y dormir.
5. No te atreves a ver una película después de las 10:00 de la noche porque sabes que te puedes quedar dormido:
Con suerte llegas a las 10:00 despierto, y es que pareciera que la televisión tiene un efecto hipnótico en ti y te arrulla hasta dormirte, sobre todo por las noches.
6. Te agrada llegar temprano a todos lados:
Llegar tarde a una cita, de cualquier tipo, no va contigo, prefieres tener tiempo de sobra y amas la puntualidad.
7. No es tan fácil para ti entender las nuevas aplicaciones:
Y es que algunas aplicaciones de celular parecieran para ti códigos difíciles de descifrar.
8. Te alegras con las promociones del supermercado:
Esa sensación de encontrar promociones del 2x1 en el super que te hace saltar de alegría, es simplemente indescriptible para ti.
9. Tu objetivo primordial en la vida, dormir más de ocho horas:
¿Insomnio? Esta palabra no existe en tu vocabulario. El sueño se respeta, y eso lo tienes bien claro y siempre buscas métodos que te puedan ayudar a dormir más horas.