Alfa Karina Arrué ha cumplido un mes desde que inició su ascenso al monte Everest y se encuentra en plena adaptación al clima de los tres campamentos bases que se encuentran a una altura entre 6 mil y 7 mil metros, pero las autoridades nepalíes han alarmado a los escaladores por casos sospechosos de covid-19.

De acuerdo a la Asociación de Rescate del Himalaya ha manifestado su preocupación por los síntomas de covid-19 como la “tos Khumbu”, causada por la combinación de la altitud y una humedad relativamente baja y nombre dado por la “cascada de hielo”, lugar donde Alfa Karina, está aclimatándose en el campamento base en su ascenso al Everest.

“No estamos seguros de si se trata de la 'tos de Khumbu' o de síntomas de coronavirus, ya que no se realizan test en el campamento base", dijo Lakpa Norbu Sherpa, que coordina misiones de rescate desde 2003 como encargado de la asociación nepalí en el campamento.

De acuerdo a Sherpa la cantidad de escaladores ha aumentado y fuentes en el país asiático informan que el pasado 15 de abril, un escalador noruego fue trasladado a Katmandú desde el campamento base por tener tos y fiebre, dos de los síntomas que presenta el coronavirus.

Sin embargo, la Asociación de Montañismo de Nepal y la mayor agencia de escalada de dicho país, Seven Summit Treks, a través de su gerente, Mingma Sherpa, dijeron que sólo eran “rumores” la sospecha de coronavirus entre los 500 alpinistas que se encuentran en el campamento base.

“Ninguno de mis clientes ha desarrollado síntomas de coronavirus. Es normal tener una tos severa a esta gran altitud, pero después del test podremos concluir si se trata de la tos de Khumbu o de casos de la covid-19”, dijo, aunque reconoció que dos guías que padecían una tos persistente fueron recientemente trasladados a Katmandú.

Alfa Karina en rotaciones al campamento base

La montañista salvadoreña está realizando rotaciones al campo base 1, 2 y 3 para aclimatar su cuerpo al congelado tiempo que vive la zona nepalí. “En el campo 2, en la madrugada, estuvimos a una temperatura de -30 grados centígrados. Cuando desperté, parte de mi cabello estaba congelado y quebrado porque quedó fuera de la bolsa de dormir”, contó Alfa Karina desde Nepal.

“Cuando subimos a los campos 2 y 3 fue bajo nevada. Mis dedos se pusieron azules, ya que, aunque mis guantes eran los adecuados, el tiempo estaba inclemente”, añadió.