Aficionados entran al parqueo del estadio Cuscatlán / Foto: Oscar Machón.


Desde tempranas horas de este domingo, la fiesta de la gran final del Apertura 2020 ya se palpaba en las afueras del estadio Cuscatlán, recinto donde Alianza FC y C.D. Águila definirán al nuevo campeón del fútbol salvadoreño. Como ha sido un torneo atípico será también una final atípica, una más observada por las autoridades de salud que piden el estricto cumplimiento de los protocolos anticovid.

En ese sentido, ha sido una semana muy difícil para la organización de este partido. No se ha podido controlar el metro y medio de distancia, el uso correcto de la mascarilla, el evitar el contacto directo entre personas, tal como se vio en la preventa de los boletos donde la afición aliancista provocó una aglomeración que fue criticada por el INDES, el Ministerio de Salud y el Fiscal General de la República, Raúl Melara.

Este domingo comenzó con un ambiente tranquilo en el Coloso de Montserrat, pero a medida que ha comenzado a llegar la afición se va tornando más complicado exigir el distanciamiento social.



Aunque los mismos asistentes afirman estar cumpliendo con las normas de salubridad establecidas, diversos videos y fotografías en redes sociales demuestran lo contrario.

Al sector se han hecho presente al menos 500 agentes de la Policía Nacional Civil quienes serán los encargados de, además de garantizar el orden y la seguridad, del cumplimiento de los protocolos de prevención.

Al punto de las 3:00 de la tarde, Alianza y Águila dirimirán el título de campeón del Apertura 2020 de la Primera División de El Salvador, en el estadio Cuscatlán. De ganar, los albos conseguirían la corona 15, mientras que los aguiluchos obtendrían la 17 y empatarían con el autodenominado "Rey de Copas" C.D. FAS.