Dicen que recordar es volver a vivir, así lo sintió el exvolante de la selección nacional, Arturo Álvarez, quien relató su experiencia de presenciar el juego entre El Salvador y México el pasado domingo como un aficionado más que estuvo sentado en las gradas del Cotton Bowl, asimismo, contó su pasión tras haber manejado en vehículo en horas nocturnas durante 5 horas desde Houston hasta Dallas, junto a sus hijos.
“Tuve la oportunidad que la selección jugara en Dallas, estando en Houston. La verdad que fue un viaje planeado con mi familia, con Édgar, con Daysi, mi esposa no pudo venir, pero estuvo bonito que los niños vinieron a ver este partido, yo sé que era algo noche, pero se pasó muy bien”, dijo el exlegionario salvadoreño.
Nos faltó el gol, fuimos superiores a México en el segundo tiempo, pero México tiene una buena selección, la experiencia que ellos tienen para manejar partidos se notó anoche, pero anduvimos cerca y hay que seguir apoyando ojalá que todo le salga bien a la selección en los cuartos de final”, añadió.
El Salvador cayó 1-0 ante México, pero se ganó el respeto de todos, incluso de Álvarez, quien alabó la actuación del arquero, Mario González y volvió a palpar el sentimiento que tuvo cuando vistió los colores “azul y blanco” en la cancha desde 2009 hasta 2019.
“Ahí adentro sentís la piel de gallina, como le dije a un amigo que uno tiene que vivir esos recuerdos bonitos y vivirlo como aficionado, apoyar a esta nueva generación que hará buenas cosas, a Hugo Pérez con su cuerpo técnico y solo toca apoyar para que la selección pueda hacer buenas cosas”, expresó Álvarez.
El exvolante nacional reflexionó sobre qué cosas han hecho resaltar la imagen de la selección salvadoreño en cuanto a su estilo de juego a comparación de su llegada en 2009. “creo que en ese momento todo el mundo estaba con confianza, felices de estar ahí, fue un buen equipo, pero eso se fue perdiendo y tocó adaptarnos a otro tipo de juego, nos olvidamos de nuestro juego, entonces Hugo Pérez quiere traer otra vez esa mentalidad y lo está haciendo, la selección se ve muy bien, tiene cosas que trabajar, pero ahí vamos”.
El exvolante nacional fue llamado por Carlos De Los Cobos en 2009 cuando militaba en el San José Earthquakes y ser nacionalizado salvadoreño, ya que sólo contaba participación en las inferiores de Estados Unidos, en ese sentido, Álvarez dijo que la contribución de los legionarios a la selección podría ayudarle, ya que, “si se unen las dos cosas con formar una selección fuerte ¿porqué no?”.
Por su parte, Álvarez dijo que el cariño de la afición salvadoreño hacia él continúa desde que se retiró del fútbol el pasado 2 de marzo de 2019 para dedicarse a ser agente de bienes raíces y dijo que el hincha cuscatleco hizo vibrar el Cotton Bowl como si estuvieran en el estadio Cuscatlán.
“Creo que habían más salvadoreños y hacer eso en Estados Unidos y aquí en Estados Unidos hay mucho más mexicanos, se sintió con el himno, se sintió con un partido de local en el Cuscatlán, casi no venía porque tenía que hacer algunas cosas, pero tenía que venir, con la familia y con los niños que vean los partidos para que se les vaya metiendo la idea”, aclaró.
“Me hubiera gustado dar un poco más con la selección como cualquier otro jugador, se siente bien, agradecido con el público por el apoyo siempre cuando uno deja de jugar, pero lo bonito de todo son los recuerdos, cuando recién me retiré fui a ver en Houston el partido que tuvo la selección contra Jamaica fue en la Copa Oro 2019, la verdad que mientras uno pueda estar ahí apoyando a la selección lo voy a hacer”, añadió.
Arturo Álvarez inició su etapa en la “selecta” en las eliminatorias mundialistas Sudáfrica 2009 y su primer juego fue en la hexagonal final ante Trinidad y Tobago, asimismo, participó en las Copas Centroamericanas 2011 y 2014, y Copas de Oro 2011 y 2015, pero tuvo dos retiros con El Salvador, el primero desde 2016 hasta 2017 y luego 11 meses en 2018, su último juego fue ante Barbados por la Liga de Naciones Concacaf en 2018.