Nefasto. Oriente se llenó de sangre, gritos y puños, debido a que los jugadores del partido de Jocoro FC contra Atlético Marte en el Polideportivo Tierra de Fuego y Municipal Limeño frente a Chalatenango en el estadio Ramón Flores Berrios protagonizaron una trifulca incontrolable por los árbitros que marcaron el punto negro de la jornada nueve del Apertura 2020.

En Morazán, Jocoro FC y Atlético Marte terminaron empatando 2-2, pero cuando todo parecía que el partido podía terminar en apretones de manos o abrazos, estalló una pelea entre el lateral de los marcianos, Héctor Crespín y el defensor de los fogoneros, Salvador Galindo, quienes entre palabras e insultos llegaron a los golpes, situación que se convirtió en una batalla campal entre jugadores obligada a ser aplacada por los elementos de la Policia Nacional Civil. Entre los heridos se encuentra el portero fogonero, Felipe Amaya, que recibió puntadas en su frente.

Fogoneros y bombarderos se jugaban la clasificación a cuartos de final. El Polideportivo Tierra de Fuego estaba exaltado por el doblete del hondureño Carlos Lanza, pero los marcianos empataron con Eduardo Rodríguez y Daniel Guzmán para dejar el boleto a la liguilla en el aire.

Sobre el final del encuentro, el gerente de Jocoro, Bertín Ferrara, impidió la grabación del suceso de un camarógrafo de un medio televisivo y terminó por despacharlo del estadio.

 

Municipal Limeño, brindó show de puños y goles

En el estadio Ramón Flores Berrios, Municipal Limeño y AD Chalatenango, dos equipos con técnicos nuevos (Nelson Ancheta por los cucheros y Ricardo Montoya por los norteños) estaban empatados 1-1 sobre el minuto 60, sin embargo en una falta sobre el volante oriental, Blas Lizama, terminó en afrentas por parte de los jugadores chalatecos, Henry Reyes y Miguel “chalatillo” Lemus.

Tras esos insultos de los futbolistas norteños, el árbitro central, Edgar Ramírez, sacó la tarjeta amarilla a Reyes y a Lizama, pero no todo terminaría ahí. Beitar Córdoba se involucró en el incidente y terminó por darle una patada al volante chalateco que provocó la respuesta de los jugadores de Chalatenango y Limeño. Lo irónico fue que tras la consulta con su cuarto línea, Ramírez evitó la expulsión y sancionó levemente con amarilla a Córdoba y Emerson Lalín, quien también se metió en la trifulca.

Cinco minutos después, Municipal Limeño aprovechó para marcar el tanto del triunfo a través de Edwin “inter” Sánchez.