“Tenemos el estrés de no generar nada económicamente”, fueron las palabras de Yohalmo Escobar, padre de los taekwondistas salvadoreños, Fabiola y Marco Escobar, quienes estaban varados durante tres meses en Nicaragua y regresaron el pasado 14 de junio a El Salvador para someterse a la cuarentena domiciliaria en Sonsonate.

Tras esa complicada situación que vivieron los hermanos taekwondistas, Fabiola Escobar explicó al programa del Comité Olímpico de El Salvador acerca de dicha experiencia. “Fue estresante, esa incertidumbre de no saber cuándo íbamos a regresar. Tuvimos tres intentos, uno íbamos a venir en barco, otro por tierra y el tercero por tierra”, expuso.

Los hermanos, Fabiola y Marco Escobar viajaron a San José, Costa Rica junto a su familia para disputar el clasificatorio de Taekwondo a los Juegos Olímpicos Tokio 2020 que se realizaron el 11 y 12 de marzo, pero no pudieron obtener su boleto, ya que la primera perdió ante la peruana Eliana Vásquez en la categoría femenina de menos de 67 kg, mientras que el segundo sucumbió ante el campeón panamericano de Estados Unidos Jonathan Healy en la división masculina de más de 80 kilogramos.

Luego de su participación en el clasificatorio, el pasado 13 de marzo la delegación de taekwondo comandada por Nassir Rodríguez en un vuelo a El Salvador, mientras que la familia Escobar intentó trasladarse por tierra hacia nuestro país, por lo cual se trasladaron hacia Managua, Nicaragua, pero un día después cerraron las fronteras pinoleras, debido a la pandemia del covid-19.

Tras ese infortunio, la familia Escobar tuvieron que atravesar momentos duros durante tres meses. En la entrevista que Yohalmo brindó a Diario El Mundo manifestó que era frustrante no poder obtener ingresos, ni tampoco poder pagar el colegio de Marco, quien estaba a punto de terminar su bachillerato y la carrera de Licenciatura en Relaciones Públicas y Marketing en la Universidad Evangélica de El Salvador de Fabiola.

Tras superar el confinamiento domiciliar en un hotel de Sonsonate, Fabiola tiene dos metas. Prepararse para los Juegos Centroamericanos Santa Tecla 2021 y aumentar su palmarés tras ganar dos medallas de oro, en los Juegos Centroamericanos de Managua el 2017 y en el Open Panamericano de Aguascalientes, México categoría Junior el 2015 y una medalla de plata y en los Juegos Bolivarianos de Santa Marta 2017.

También sacar su carrera universitaria y luego utilizarla en pro de los atletas salvadoreños. “Quiero tener una empresa que represente a los deportistas nacionales e internacionales, que lleve la imagen y el patrocinio de los deportistas, incluso quiere colaborar en la difusión del taekwondo y la importancia del deporte para los niños y los padres”.