El extremo galés del Real Madrid, Gareth Bale, parece tener mala suerte cuando se avecinan partidos de gran importancia.
Resulta que Bale sufre un "edema sin rotura fibrilar en el sóleo" izquierdo, según informó este miércoles el Real Madrid, con lo que podría estar unos quince días de baja.
Bale fue sometido a unas pruebas médicas que evidenciaron "un edema sin rotura fibrilar en el sóleo de la pierna izquierda", afirmó el club blanco en un breve comunicado médico.
El Real Madrid se limita a afirmar que el jugador está "pendiente de evolución", aunque, según la prensa española, podría estar unos quince días de baja.
Bale no pudo completar el pasado 26 de septiembre el encuentro de Liga de Campeones contra el Borussia Dortmund, que el Real Madrid ganó 3-1 por problemas musculares, y después no jugó el partido de Liga del domingo pasado contra el Espanyol (2-0).
El sábado, antes del encuentro contra el Espanyol, el técnico blanco Zinedine Zidane había afirmado que se trataba de "una sobrecarga", pese a lo cual lo reservó.
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No obstante, el Real Madrid permitió al extremo viajar a Gales para concentrarse con su selección de cara a dos partidos decisivos ante Georgia e Irlanda para lograr el pase al Mundial de 2018.
El martes, la Federación Galesa (FAW) anunciaba que el jugador abandonaba la concentración y no jugará esos partidos.
Bale "se incorporó a la concentración en Cardiff. Pero tras una conversación con el Real Madrid, pasó un escáner que confirmó que no estará en condiciones de jugar", escribió la FAW en un comunicado.
Chris Coleman, el seleccionador galés, llamó al delantero del Barnsley (segunda división) Tom Bradshaw para reemplazarlo.
Gales, que juega el 6 de octubre ante Georgia y el 9 frente a Irlanda, ocupa la segunda plaza del grupo D europeo (14 puntos), que le permitiría jugar la repesca, a cuatro unidades del líder Serbia y con uno de ventaja sobre Irlanda (3ª).