En la vida, las mujeres han sufrido de los estereotipos y prejuicios que la sociedad ha adoptado, pero el deporte es el vehículo para romperlos. En El Salvador, Gladys Mejía, es la única entrenadora que dirige en la Liga Mayor de Baloncesto en la rama masculina, específicamente al Cojutepeque y manifestó que pese a la poca afluencia de su género en el baloncesto sabe que hay mujeres que tienen la capacidad para asumir su cargo.
“A la hora de pedir rendimiento tanto físico, técnico y táctico se les exige por igual a los hombres y a las mujeres, obviamente que las diferencias físicas hacen un resultado marcado a favor de los hombres, pero hay que destacar que las mujeres pueden ser más aguerridas, más decididas y determinantes a trabajar que los hombres, y son más efectivas en su trabajo”, expresó la entrenadora de los cojutepecanos.
Mejía es una mujer preparada, cuenta con una Licenciatura en Ciencias de la Educación con Especialidad en Educación Física Deporte y Recreación en la Universidad El Salvador, es esposa y madre. Con ese currículum tomó el cargo para entrenadora de CMB Cojutepeque en las temporadas 2015 y 2016 tras haber sido preparadora física del mismo club y asumió otro compromiso con la experiencia de las responsabilidades anteriores.
“Como mujer, el obstáculo más grande es quitarse el estigma de la incapacidad para desempeñar un rol o un papel, porque generalmente se minimiza o se invisibiliza de que las mujeres pueden estar al frente de una responsabilidad tan grande”. Reflexionó Gladys, quien al momento de tomar el cargo de entrenadora se convirtió en un ejemplo para otras mujeres.
Su devoción por el baloncesto a los 7 años de edad, un deporte que lo lleva en la sangre por su padre, le ha permitido trascender sin escuchar comentarios machistas que pudieran afectarla, su único objetivo es dejar un legado para que otras mujeres puedan encontrar su pasión y romper los paradigmas preestablecidos.
Ha llegado a semifinales con Cojutepeque en 2016 y en su regreso a la Liga Mayor de Baloncesto al equipo que le dio la oportunidad para este cargo quiere apuntar al título, no la detuvo ni la pandemia del covid-19, por eso quiere decirle a otras mujeres que sus miedos los pueden tirar a la basura.
“La práctica deportiva en las mujeres es algo que no se puede descartar o minimizar, es de vital importancia para nuestra sociedad que las mujeres puedan crecer como personas integrales”, expresó.