"No ha pasado nada entre Luis Enrique y yo". El lateral Jordi Alba, llamado de nuevo a la selección española después de dos convocatorias, negó este martes cualquier problema con el seleccionador, que le entrenó en el Barcelona, y se mostró contento de volver a la Roja para el último partido de Liga de Naciones.

"Sinceramente, no ha pasado nada entre Luis Enrique y yo, nunca hemos discutido", aseguró el defensa internacional de 29 años en una rueda de prensa de la selección, que enfrentará el jueves a Croacia en la Liga de Naciones y el domingo recibirá a Bosnia en un amistoso.

"Nunca hemos tenido ningún problema, me conoce perfectamente, yo también a él y a su staff técnico, me ayudaron muchísimo en su día. Vengo con mucha ilusión de hacer las cosas bien. Es verdad que llevaba 2 convocatorias sin venir y para mi ya se hacía un mundo. Por suerte puedo estar aquí".

Protagonista de un excelente inicio de temporada con el Barcelona, con el que ha marcado dos goles y repartido seis asistencias, el lateral había sido ignorado por Luis Enrique, hasta el punto que la prensa española sospechó de una mala relación entre ambos.

Alba aseguró este martes que el único desacuerdo que tuvo con el técnico fue sobre sus minutos durante la tercera y última temporada de Luis Enrique en el conjunto azulgrana (2014-2017).

"Es un entrenador con carácter, yo también me considero un jugador con carácter, reconoció el futbolista. "Pero no tengo que pedir perdón a nadie, ni el seleccionador a mi".

"Es verdad que la última temporada no tuve los minutos que todo jugador quiere, pero nunca he dicho una mala palabra de Luis Enrique. Es una persona muy buena. Tiene sus decisiones como todos los entrenadores, te gusten más o menos, pero yo nunca tuve ningún problema con él", concluyó Alba.

La Roja debe ganar a los croatas para asegurarse la clasificación a la final a cuatro de esta nueva competición. En su anterior enfrentamiento, en septiembre, los subcampeones del mundo recibieron una paliza 6-0 en España.