La industria de seguros en El Salvador resistió a los embates de las crisis que marcaron al 2020: la emergencia sanitaria por la pandemia, las dos tormentas tropicales y la peor recesión económica de los últimos 40 años. Las dos primeras elevaron el pago póliza, mientras que el desplome en la dinámica productiva recortó las previsiones de crecimiento del rubro.
A diciembre de 2020, el sector reportó $74.16 millones en indemnizaciones solo en los ramos vida y previsional relacionados con la pandemia del covid-19, mientras que, en el sector de incendios y líneas aliadas (asociado con las tormentas Amanda y Cristóbal) alcanzó los $26.91 millones.
Claudia Vélez, directora ejecutiva de la Asociación Salvadoreña de Empresas de Seguros (ASES), dijo que el rubro afrontó un año atípico y consideró que la crisis sanitaria por sí sola es un suceso que “cambió por completo la dinámica y social, y económica del país”.
Vélez añadió que internacionalmente las pólizas de gastos médicos tienen excluido los temas relacionados con las pandemias, pero que en El Salvador las aseguradoras decidieron apoyar a sus clientes.
A causa de la pandemia, muchos tuvieron dificultades económicas y de junio a diciembre se recibieron 5,092 solicitudes de diferimiento de pago”, Claudia Velez, Directora Ejecutiva de ASES
“Las empresas asociadas a ASES, apoyando a sus asegurados, han asumido las coberturas del tratamiento por covid-19, lo cual consideramos ha sido de mucha utilidad para quienes han tenido que luchar para salir adelante ante esta enfermedad”, explicó.
Los ramos con más afectación para la industria local fueron los de vida y previsional, en específico el seguro de invalidez y sobrevivencia con el que trabajan las Administradoras de Fondos de Pensiones.
Vélez destacó que el monto indemnizado para ambos ramos, solo por los efectos de la pandemia, representa cerca del 70 % de lo pagado durante todo el año en 2017, 2018 y 2019, mientras que en el de incendios y líneas aliadas corresponde al 20 % de lo cancelado en los mismos años.
Sector a la expectativa
Pedro Geoffroy Carletti, presidente de la Asociación, dijo que, si bien el año fue retador, se demostró la necesidad de contar con un sector fuerte y de respaldo ante estas emergencias.
El ejecutivo sostuvo que, pese a que el sector reportó algunas cancelaciones, al final del año el primaje reportó un crecimiento del 2.8 %.
Si bien el ritmo es inferior a la previsión que se tenía para 2020 (de entre el 6 % y 7 %), la industria pudo navegar e incluso generó más empleos directos y cerró en 1,787 plazas.
El sector seguros no escapa a la vorágine de la pandemia. Las expectativas de crecimiento eran entre el 6 % y 7 %, pero destaca que al final del día creció al 2.8 %”, Pedro Geoffroy Carletti, Presidente de ASES
El indicador más afectado por las condiciones de 2020 fue el de las utilidades, el cual bajó un 33.5 % con respecto al de 2019 y cerró en $24.47 millones, es decir, $12.34 millones menos que los $36.81 millones que tuvo un año anterior.
El año pasado, el índice de siniestralidad alcanzó los $383 millones y es considerado el más alto de los últimos 10 años.
Uno de los rubros más afectados fue el de seguros de automotores, el cual reportó 19,077 cancelaciones, las que equivalen al 91 % del total de las que recibió el sector en 2020 (20,946), las que se espera comiencen a recuperarse con una mejora en la economía.
3 claves del sector para el 2021
- Digitalización: Se espera que el sector tenga un mayor uso de tecnología en sus procesos, tendencia que se detonó -en parte- por la misma pandemia.
- Costo del reaseguro: ASES está a la expectativa de los ajustes que hagan los reaseguradores este año, aunque todo indica que serán alzas.
- Innovación: Junto con la virtualización de los procesos se espera que haya más innovación entre las compañías y mejore la cobertura.