El Ministerio de Trabajo destacó la semana pasada que el sector privado está acatando las medidas para disminuir riesgos de contagio aplicando medidas de bioseguridad. / DEM


La Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (Camarasal) está a favor de revisar el plan de reapertura de la economía y habilitar sectores previstos para la fase dos que tienen menos riesgo de contagios.

De acuerdo con el presidente de la gremial, Jorge Hasbún, la medida debe ser avalada por la Mesa de Reactivación Económica, a la que recomienda incluir a especialistas para discutir el adelanto de operaciones de rubros con perfiles más seguros.

La fase dos estaba prevista para que se iniciara el pasado 7 de julio, pero se pospuso para el 21 de julio por un repunte de casos de covid-19. La medida alterará el plan de reapertura y ahora, si no hay cambios mayores, la “nueva normalidad” se podría alcanzar hasta el 1 de septiembre.

La fase dos incluye el regreso de sectores de peso en la economía como el de call centers y el reinicio de actividades en toda la cadena industrial. Desde el inicio de las reuniones de la Mesa, el Ejecutivo fue claro que el avance de las fases dependía del control de la pandemia. Sin embargo, en el último mes -según cifras oficiales- el ritmo de contagios creció y ahora arroja un promedio de 250 casos nuevos por día.

Hasbún explicó en el programa Frente a Frente que están de acuerdo en que la reapertura sea paulatina, pero destacó los comentarios de varios ministros de que la aplicación de los protocolos en el sector privado son satisfactorios y que a partir de ellos sería factible avanzar en la que calificó una fase “light”.

“Puede ser que el transporte público no esté listo para avanzar, pero hay otros sectores que sí lo están y pueden hacerlo, y eso evita que se pierdan empleos”, dijo el empresario que alertó que hay 300,000 empleos en riesgo debido al shock (impacto) económico de la peor pandemia en más de un siglo.

Hasbún añadió que el sector formal está cumpliendo los protocolos, pero considera que hay que darle apoyo al sector informal con información sobre medidas para evitar riesgos.

 

Mesa técnica para evaluar continuidad

Alertó que un retraso extremo del plan del Ejecutivo puede provocar más afectaciones al tejido productivo. “Si se siguen cerrando las fases vamos a llegar a noviembre (...) No se trata de cerrarlo todo”, dijo y recalcó la necesidad de habilitar una mesa estratégica que revise todos los elementos y defina soluciones.

“No estamos en contra de tomar decisiones duras como una cuarentena rigurosa, pero estamos en contra de que no haya un plan general y una mesa técnica para tomar esas decisiones”, destacó Hasbún.

El presidente de Camarasal advierte que un deterioro mayor puede arrastrar a la actividad productiva a un punto de no retorno y provocar cierres definitivos de actividades.

 

¿Qué contempla la fase 2?

La fase dos comprendía la reactivación de las industrias de plástico, papel y cartón, calzado, cosméticos, creativas, dispositivos tecnológicos y la de manufactura que no estaba incluida en la primera fase. Además de los sectores de autopartes y médicos en general, servicios profesionales presenciales y bienes raíces.

Incluye el reinicio de actividades de los restaurantes con espacios abiertos y cerrados. Asimismo incluye autorización para la circulación del transporte colectivo con medidas sanitarias y limitaciones de capacidad. El cronograma también establece que en esta fase las personas podrán salir a caminar en grupo (si viven bajo el mismo techo).