El presidente de Costa Rica propuso el fondo ante las Naciones Unidas para la recuperación de las economías ante la pandemia. /DEM


El presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, propuso este martes ante la ONU un Fondo contra la Economía del covid-19, con un apoyo extraordinario de $500,000 millones y financiado por los países ricos, y ha pedido una reducción del gasto militar, lo que supondría "menos armamento y más recursos para el desarrollo".

La iniciativa FACE, por sus siglas en inglés, estaría financiada con "el 0.7 por ciento del PIB de las economías más grandes y fuertes del mundo --aquellas que representan el 80 por ciento del PIB mundial--, recursos que serían "intermediados por uno o varios bancos multilaterales de desarrollo, como préstamos concesionales a los países en desarrollo". Alvarado ha considerado que FACE serviría para "la protección de cada país y para la protección de la comunidad global".

El presidente costarricense destacó que el gasto militar "alcanzó la absurda suma de $1,900 millones en 2019", lo que supone "el mayor incremento anual de la última década", mientras que la Oficina Internacional de la Paz calcula que "con el coste de un tanque de guerra se podría tratar a 26,000 personas de malaria y que, con el coste de un portaaviones se podría reforestar un área más grande que el estado de Florida".
Si al menos una fracción de todos esos recursos se utilizaran para combatir la pandemia, así como la crisis climática, nuestra generación podría decir orgullosa que supo redefinir sus prioridades cuando las circunstancias así lo requirieron".
Carlos Alvarado
Presidente de Costa Rica

También ha planteado la creación de un Consejo de Seguridad Humana, "que genere los incentivos para trasladar los recursos humanos y económicos del mundo hacia el desarrollo y la paz y no hacia la industria bélica".

Asimismo, solicitó la reanudación de las conversaciones de paz en Palestina, llamando a "una solución justa" que pasaría por la creación de "dos Estados", y ha celebrado los acuerdos de paz entre Israel, Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Bahréin. También exigió a la Corea del Norte que "respete y aplique las resoluciones del Consejo de Seguridad" en materia de armas nucleares, paz, estabilidad y seguridad.

Respecto a la situación en América Latina, Alvarado llamó la atención sobre "el bloqueo económico de Cuba, lo cual afecta a su población", por lo que debe "cesar"; solicitó una solución "pacífica, expedita y democrática desde los venezolanos a la grave situación política, humanitaria y de violación a los Derechos Humanos que vive ese pueblo" y mostró preocupación por la situación en Nicaragua y Haití.

Por último, hizo un llamamiento a abordar "las grandes amenazas a la seguridad humana de esta y la próxima generación, la crisis climática y la desigualdad" y a atajar la salida de la crisis provocada por la pandemia con "economías inclusivas, sostenibles, descarbonizadas y respetuosas con los Derechos Humanos".