La empresas incorporaron solo 148,000 nuevos empleados en diciembre y salvó 2,000, todos en el sector privado. Los economistas esperaban al menos 200,000 empleos nuevos.
El optimismo habría sido alimentado el jueves cuando la firma de servicios laborales ADP informó que el sector privado aumentó en 250,000 la cifra de nuevos empleos.
La revisión de los datos de octubre y noviembre también restaron 9,000 empleos por lo cual la imagen del último trimestre del año resulta más decepcionante. El promedio de empleos creados en los últimos tres meses del año fue de 204,000, dijo el Departamento de Trabajo.
El menor crecimiento podría atribuirse a que la cercanía del pleno empleo torna más difícil encontrar mano de obra calificada, un sentimiento que comparten muchas empresas.
Varias reportaron que debieron subir los salarios para conseguir nuevos empleados y eso se reflejó en el aumento de pago promedio de la hora de trabajo a $26.63 desde $26.54 en noviembre. En diciembre de 2016 esa remuneración era de $25.98. Ese incremento salarial es de 2.5% a lo largo del año y está levemente por encima de la inflación.
Volatilidad
Los analistas, cuyos pronósticos resultaron erróneos, atribuyeron la menor generación de puestos de trabajo a la volatilidad de las estimaciones.
Los mercados parecieron desdeñar los resultados, divulgados simultáneamente con el anuncio de que el déficit comercial de noviembre fue el mayor en un lustro y alcanzó récords que superaron los del cierre del jueves.
Jim O’Sullivan, de High Frequence Economics, que había calculado que se crearían 210,000 trabajos el mes pasado, matizó: “El error no fue muy grande dada la normal volatilidad y no hay señales de que la tendencia general se haya debilitado”, y advirtió que el promedio de empleos creados mensualmente fue de 171,000 y la tasa de desempleo cayó 0.6 %.