A raíz del deterioro en el riesgo soberano de El Salvador y la expectativa que la Reserva Federal (Fed), de Estados Unidos, aumente los tipos de interés en 2017, los nuevos bonos salvadoreños tendrían que pagar una tasa de interés del 11.4 %, indicó ayer la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico (Fusades).

Las continuas degradaciones que sufrió el perfil crediticio salvadoreño en 2016, llevaron a que los $600 millones en bonos emitidos en febrero pasado pagaran la tasa más alta de los últimos 15 años, llegando al 8.6 %; y este nivel podría superarse este mismo año.

Fusades elaboró un escenario en donde, además de prever que se mantendrá el efecto de las bajas calificaciones de riesgo otorgadas al país por las agencias Moody’s Investors Service, Standard & Poor’s (S&P) y Fitch Ratings; la Fed decidirá elevar esta semana los tipos de interés de referencia hasta el 0.75 %.

Con ese ajuste en la política monetaria estadounidense, la tasa de las Letras del Tesoro de ese país, estima Fusades, volvería a los niveles de 2006, es decir, 5.2 %.

Por otro lado, el “spread” de la deuda salvadoreña, calculado con el Índice de Bonos de Mercados Emergentes (EMBI), se mantendría en 6.16 %, por lo que, para que el mercado encuentre atractivo invertir en la deuda salvadoreña que se emita, el Estado tendría que ofrecer una tasa del 11.4 %, es decir, el 5.2 % que paga Estados Unidos más el ya mencionado 6.16 %.

 

Mayor riesgo país

El EMBI, elaborado por la entidad financiera estadounidense JP Morgan, calcula el diferencial, también llamado “spread”, entre el rendimiento que paga el bono emitido por un Gobierno, banco o empresa domiciliada en un país emergente, y el que paga el bono estadounidense, considerado “libre de riesgo”. Este spread se expresa en puntos básicos y 100 de ellos equivale a un punto porcentual (1 %).

De esta manera, el EMBI indica cuánto rendimiento adicional debe ofrecer un país emergente para que un inversionista encuentre atractivo adquirir su deuda. Por ello, el riesgo país está relacionado al costo del financiamiento externo de entidades tanto públicas como privadas.

En la última emisión de bonos, El Salvador pagó un diferencial de 6.16 % sobre la tasa estadounidense, que en ese momento fue 2.4 %.

En 2006, El Salvador pagó una tasa de 7.6 %, de la que 5.2 puntos porcentuales correspondieron al interés estadounidense, y 2.4 puntos al riesgo soberano del país.

“Nos hemos endeudado en estos últimos años en $5,000 millones, en un período de tasas bajas internacionales. Estamos en una transición hacia una normalización de las tasas bajas de interés, que podría andar en dos puntos adicionales en el mediano plazo”, explicó Pedro Argumedo, investigador del Departamento de Estudios Económicos (DEC), de Fusades.

 

Desempeño económico

 

Empleos

A noviembre de 2016 se habían creado 11,118 nuevas plazas indican datos oficiales, 1.4 % más que hace un año. Mientras que la demanda interna cerró con una inflación negativa de 0.9 %.

 

Economía

En 2016, el crecimiento económico fue de 2.5 %. Un desempeño impulsado por el sector agropecuario que reportó un 5 %, seguido de servicios con 3.2 % y comercio con 2.5 %, indicó Fusades.

 

Importaciones

Según Fusades, las importaciones de bienes se contrajeron en 5.4 % en 2016. Mientras que al excluir la compra de petróleo y gas, este rubro habría cerrado con una caída del 3.3 %, señaló la entidad.



$4,576 Millones

Crecieron las remesas familiares durante 2016; un aumento de $306 millones respecto al año anterior, dijo Fusades.



20 % Aumento

El Fondo Monetario Internacional (FMI) estima que los precios del petróleo aumentarán en 20 %, para 2017.

 

11.4 % Interés
Pagaría El Salvador si coloca bonos en el mercado internacional, si la Fed eleva los tipos de interés este 2017.

 

$5,089 Millones
Se incrementó la deuda externa desde 2008, alcanzando, en 2016, $16,225 millones, y con una tasa baja de financiamiento.