Este fideicomiso se fondea con $600 millones de los $645.8 millones que se emitieron en septiembre pasado en Certificados del Tesoro (Cetes) y se encuentra bajo la administración del Banco de Desarrollo de El Salvador (BANDESAL).
El destino de estos recursos es reactivar el tejido productivo tras el impacto de la pandemia del covid-19, que arrastraría a la economía a un desplome de hasta -9 % según proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI).
De esos $600 millones, un paquete de $100 millones se destinará para créditos de sector informal que se entregarán en condiciones blandas del mercado, anunció el presidente de la República, Nayib Bukele.
El mandatario detalló que se entregarán créditos al sector informal sin requerir garantía, a una tasa de interés del 3 % y a un plazo máximo de 10 años con pagos mensuales. Además de un período de gracia plena de 12 meses.
¿Quiénes pueden gestionar estos recursos?
- Empresarios afectados por la pandemia y deben inscribirse en el portal de Firempresa.
- Poseer al menos un crédito vigente con “buena categoría” de riesgo con calificación de A1, A2 o B, otorgadas antes del 29 de febrero de 2020. Estos préstamos deben estar registrados en el sistema financiero nacional, cooperativo o sociedades de créditos.
- Si el empresario no tiene un crédito activo con el sistema financiero formal, también pueden participar quienes hayan recibido algún préstamo de un proveedor registrado en el Banco Central de Reserva (BCR).
- También pueden gestionar créditos los empresarios que estén inscritos en la Comisión Nacional de la Micro y Pequeña Empresa (Conamype) o que tengan registro de IVA.