La economía mundial enfrenta desde hace meses cuellos de botella en las cadenas de suministro que alimentan la inflación y amenazan el crecimiento, un tema central de las reuniones del FMI y el Banco Mundial, y del G20 y G7 este miércoles en Washington.
Los problemas de suministro, provocados por el aumento de la demanda de transporte logístico en medio de la recuperación de la pandemia, combinada con la escasez de mano de obra, llevaron al Fondo Monetario Internacional a revisar a la baja las previsiones de crecimiento de varios países, entre ellos Estados Unidos, China, Alemania y Reino Unido.
La economía mundial se enfrenta a un "momento particularmente desafiante", dijo en conferencia de prensa la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva.
Y advirtió sobre otra variable que también contribuye a las limitaciones de la oferta: el retraso en la vacunación anticovid en los países en desarrollo.
Cerca del 58 % de la población en las economías avanzadas ya está completamente inmunizada, en comparación con el 36 % en las economías emergentes y menos del 5 % en los países pobres, según el FMI.
Deberíamos preocuparnos por esta divergencia porque mientras se amplíe, este riesgo de interrupciones en las cadenas de suministro globales será mayor y, por lo tanto, la presión sobre los precios, la presión sobre la inflación será más alta".
Kristalina Georgieva
Directora del FMI
La amenaza de la inflación.
Lo que se teme es que el aumento de los precios cree un círculo vicioso que obligue a las economías avanzadas a subir las tasas de interés para contener la inflación, lo que elevaría los costos de los préstamos para las naciones en desarrollo y retrasaría aún más su recuperación.
La inflación en Estados Unidos, primera economía mundial, repuntó en septiembre y llegó al 5.4 % interanual, dijo el miércoles el Departamento del Trabajo.
Si bien el FMI proyecta que la inflación en las economías avanzadas retroceda a mediados del próximo año, "este desajuste entre el crecimiento de la demanda y el retraso de la oferta indudablemente crea presión sobre los precios", dijo Georgieva.
El presidente del Banco Mundial, David Malpass, advirtió por otra parte que algunos de los picos de precios "no serán transitorios".
Y agregó que los cierres de fábricas y puertos durante la pandemia alteraron el suministro, impulsando las tarifas de envío y el costo final de los bienes.
"Se necesitará tiempo y la cooperación de los responsables políticos de todo el mundo para resolverlo", afirmó.
Malpass también lamentó la situación en las naciones en desarrollo que ya enfrentan un panorama "sombrío" y un "trágico revés del desarrollo" causado por la pandemia que ha llevado a 100 millones de personas a la pobreza extrema y está causando problemas de deuda en muchos países.
No entrar en pánico.
Los retos de la oferta a escala mundial son el foco de la cita de ministros de Finanzas del Grupo de las 20 economías avanzadas (G20) y del encuentro más pequeño del los del Grupo de los Siete (G7), que reúne a las principales potencias industrializadas.
Rishi Sunak, ministro de Hacienda del Reino Unido, que preside el G7 hasta fin de año, pedirá una acción global para atender este tema.
Si bien su país se ve particularmente afectado por estas disfunciones, agravadas también por el Brexit, Sunak dijo que abogará por una mejor "coordinación" para hacer que las cadenas de suministro sean "más resilientes".
Estados Unidos, primera economía mundial, anunció una iniciativa para garantizar que los productos vayan "de los barcos a los estantes", con operaciones las 24 horas en los principales puertos.
El presidente Joe Biden prevé anunciar este acuerdo en una reunión este miércoles con los líderes del gigantesco puerto de Los Ángeles y la Unión Internacional de Estibadores y Almacenes (ILWU).
Otras empresas, incluidas Walmart, FedEx y UPS, también se comprometieron a trabajar horarios extendidos, dijeron funcionarios de la Casa Blanca. |
Cuando se acerca la temporada de fiestas, la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, instó el martes a la población a no entrar en pánico, diciendo que hay muchos bienes disponibles y que los aumentos de precios deberían ser "transitorios".
Pero reconoció que las presiones sobre los precios no "desaparecerán en los próximos meses. Este es un shock sin precedentes para la economía mundial", dijo a la cadena CBS.