Carolina Rovira, coordinadora de la FES, acompañada de Roberto Kriete, presidente de la Fundación Gloria de Kriete; Juana Jule, directora del programa Oportunidades; y Fernando Kriete, secretario de la junta directiva de la Fundación. /DEM

Más de 3,000 jóvenes salvadoreños han creado resiliencia y superado las brechas de educación a través de su participación en el programa Oportunidades, creado hace 14 años por la Fundación Gloria de Kriete.


La Fundación diseñó este programa para acompañar a los jóvenes a lo largo de ocho años como una escuela complementaria para jóvenes de bajos recursos, a quienes apoya desde que están en noveno grado hasta que alcanzan su inserción laboral.


A más de una década de su creación, ha beneficiado a 3,008 salvadoreños de los cuales el 60 % corresponde a mujeres, indicó Juana Jule, directora del programa. Añadió que en cada beneficiado se invierten en promedio $12,000 desde el proceso de selección hasta que encuentra empleo, así la Fundación ha destinado cerca de $36 millones en la formación de estos salvadoreños.




Oportunidades da un tratamiento integral al ser humano para que pueda trascender las condiciones paupérrimas en que muchos de estos muchachos viven y que podamos cambiarles la vida”.
Roberto Kriete
Presidente de la Fundación Gloria de Kriete



Las tres fases del programa son:



  • NIVELA: Es la fase de refuerzo académico que consta de ocho áreas, entre ellas formación lingüística, matemáticas, inglés, emprendimientos, valores.

  • DESPEGA: Comienza a implementarse durante el bachillerato mediante la realización de diagnósticos vocacionales. Acompaña en la universidad.

  • VUELA: Da seguimiento a cada joven universitario o graduado para aumentar sus posibilidades en la colocación del mercado laboral. Ofrece talleres.


Resiliencia.


Ayer, la Fundación para la Educación Superior (FES), de la Escuela Superior de Economía y Negocios (ESEN), presentó los resultados de una investigación cualitativa sobre el impacto del programa Oportunidades donde se destacó que el proyecto, más allá de la inversión económica, es un ejemplo de lo que el sector privado puede aportar.


Carolina Rovira, coordinadora académica de la FES, explicó que en el análisis determinaron que el programa encaja en la descripción de un entorno para el desarrollo y promover la resiliencia estudiantil, pues provee a los estudiantes oportunidades para concluir sus estudios y expandir sus relaciones.




El programa Oportunidades ha apoyado a más de 3,000 jóvenes desde su creación en 2007. /DEM

La investigación, que incluyó entrevistas a beneficiados y datos de resultados académicos, reveló que los participantes obtuvieron mejores calificaciones en la Prueba de Aprendizaje y Aptitudes para Egresados de Educación Media (PAES) -que ahora es Avanzo-.


“Los efectos a nivel de género también desaparecen. Esto es relevante pues se determinó que el hecho de ser mujer y ciertos factores de riesgo relacionados con concepciones adversas de género (como las mujeres son menos aptas para el mercado laboral) eran relevantes para explicar la probabilidad del ingreso al programa”, manifestó la coordinadora.


Oportunidades es operado por Ágape, lo que le permite tener una cobertura del 24.8 % a nivel nacional con presencia en Santa Ana, Ahuachapán, San Salvador, Chalatenango y San Miguel.











Los beneficiados reciben formación lingüística, científica, lógica matemática, computación e inglés, además vocación profesional.



La Fundación detalló que tiene alianzas con 21 universidades para que los jóvenes continúen sus estudios superiores. Además, durante la tercera fase del programa, se desarrolla la Certificación de Empleabilidad donde se imparten talleres, laboratorios y charlas para preparar a los beneficiados en su inserción al mercado laboral.