El Ministerio de Hacienda confirmó esta noche que el freno preventivo de la economía por la pandemia del COVID-19 generará una caída de los ingresos al fisco por el orden de los $700 millones.
La cifra fue publicada por el ministro Nelson Fuentes en su cuenta en Twitter donde recalcó que solo en marzo la recaudación cayó en $287 millones con respecto a 2019 (alrededor de un 85 % menos).
"La cuarentena domiciliar ha detenido la marcha del consumo de productos y servicios. Estimamos una pérdida de más de $700 millones a lo largo de la emergencia", publicó.
Solo en el mes de marzo hemos tenido una caída de $287 millones en recaudación de IVA y Renta, con respecto a 2019. La cuarentena domiciliar ha detenido la marcha del consumo de productos y servicios. Estimamos una perdida de más de $700 millones a lo largo de la emergencia.
— Nelson Fuentes (@Nelfuent) April 17, 2020
La economía salvadoreña es altamente dependiente de las remesas y uno de sus motores es el consumo, el cual representa alrededor del 80 % del Producto Interno Bruto (PIB).
Fuentes defendió la búsqueda de financiamiento que él lidera. El miércoles se conoció que ya se negocian alrededor de $1,200 millones con organismos multilaterales, de $2,000 millones autorizados por la Asamblea Legislativa.
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Fuentes recordó que Hacienda debe amortiguar la caída de ingresos por el freno de la economía, la que se encuentra funcionando en el mínimo desde el pasado 21 de marzo, fecha en la que se activó el régimen de cuarentena para evitar contagios de COVID-19.
Entre los compromisos que el Ejecutivo tiene que cubrir están los programas sociales, el pago del Fondo para el Desarrollo Económico y Social de los Municipios de El Salvador (Fodes) a la alcaldías, la deuda pública y salarios, entre otras obligaciones.
El ministro agregó que en la medida se concrete el ingreso de fondos frescos se podrán activar además planes anticíclicos que permitirán apoyar al sector informal de la economía y la micro y pequeña empresa.
Diversas fundaciones, entidades oficiales, bancos de inversión y multilaterales estiman que la economía de El Salvador cerrará el año con un PIB disminuido, con un desempeño entre el -3 % y -6 %.
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Fuentes apeló esta noche a la necesidad de que las empresas que siguen operando con normalidad y las que han reportado incremento en ventas deben seguir al día con sus aportes al Estado,
"Deben seguir aportando al Estado en el pago de impuestos. La calificación tributaria de grandes empresas, debe reflejarse en el aporte solidario al país”, añadió el funcionario que también apeló a la solidaridad de otros actores como el sistema financiero.
"El sistema financiero también debe mostrar su cara más solidaria, activando líneas de crédito de fácil acceso, para que las MIPYMES golpeadas con la crisis, puedan resurgir con el importante aporte que brindan al país generando empleo y movilizando la economía", sentenció.
Alerta sobre la deuda
Fuentes confirmó el miércoles que la deuda con relación al PIB alcanzará el 80 %. Actualmente el indicador se mantiene en el 72 %, pero subirá tras completarse el cupo de $2,000 millones autorizado por el legislativo, el cual equivale a ocho puntos porcentuales, situación que agravará el déficit fiscal.
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Sin embargo, el ministro sostiene que la proporción incluso puede superar el 80 % debido, a que con la contracción prevista del PIB el peso de la deuda se incrementará. “Resulta que nuestro PIB va a caer porque habrá una recesión económica que pasa como mi denominador es menor $25,000 millones no me va a dar 80 % del PIB me va a dar más”, argumentó
En ese sentido adelantó que eso obliga a que entre 2021 y 2024 se tengan que aplicar medidas que ayuden a disminuir la deuda, pero que por ahora se tendrán que hacer reformas a la Ley de Responsabilidad fiscal, primero garantizar la atención de la salud pública, la atención a la población vulnerable e impulsar la reactivación de los sectores más pequeños, renovar la actividad productiva.